Compañía para una cita histórica

L a desaparición de la lluvia de la primera mitad de la semana dio paso a la exquisitez con la que los cofrades de la Hermandad de la Defensión afrontaron las jornadas del jueves y viernes recién dejados atrás. Así llevaron, en unas parihuelas a hombros de sus hermanos, la imagen del crucificado al colegio de la Compañía de María, un encuentro con su propia historia previsto en un cincuentenario que dejo claro que la sencillez y la elegancia se pueden dar la mano.

A la recepción en el centro educativo otrora en manos de religiosas se abrirían veinticuatro horas de presencia entre aquellos muros que ya lo guarecieron hace cincuenta años. Y entre los escolares (y también los seminaristas, que allí tienen su sede actual) la conmemoración defensionista se cargada de momentos bonitos que ya comenzaban cuando, por calles Sevilla, Paul, Nuño de Cañas, Zaragoza o Compañía de María, parecería, en efecto, que fuese Martes Santo.

Las preces del director espiritual Fray Alfonso Jiménez Santos aquella noche en la iglesia del colegio, el traslado al patio del Cristo de la Defensión a la mañana siguiente y en plena jornada escolar, las meditaciones ante imágenes marianas, la celebración de la Eucaristía en la noche del viernes y, por supuesto, el multitudinario regreso a Capuchinos dejaron imágenes entrañables.

Misa estacional

Además de la presentación, mañana lunes, de la monografía histórica que quedará como aportación de esta conmemoración, la cita más inmediata nos trasladará, el próximo viernes día 30 de octubre al convento en que tienen su sede canónica. A las 20,30 horas tendrá lugar una celebración de la Eucaristía que será oficiada por Monseñor José Mazuelos Pérez, el obispo diocesano.

Esta Misa Estacional contará con el acompañamiento musical, al órgano y con un repertorio eminentemente gregoriano, de Ángel Hortas y vendrá a coincidir, exactamente, con el día en el que se cumplirán los cincuenta años de la erección canónica de la cofradía en la iglesia conventual de los Padres Capuchinos.

Tras la finalización de esta celebración eucarística, tendrá lugar una cena benéfica cuyos fondos serán dirigidos a las atenciones propias de la obra social que realiza la Hermandad de la Defensión. Se efectuará en el salón de los Apóstoles, de las Bodegas González Byass.