El comisario provincial advierte del aumento de la delincuencia juvenil
Deira alerta en su discurso de los Ángeles Custodios de que cada vez son más los delitos cometidos por menores
CÁDIZ Actualizado: GuardarEl reciente debate en la opinión pública sobre la falta de autoridad de los profesores en las aulas, también ha llegado a la Policía, donde advierten del aumento de los delitos que son cometidos por menores de edad, amparados en la protección que les ofrece la Ley de Menores. Un «preocupante» incremento que centró el tradicional discurso anual del comisario provincial de Policía en Cádiz, José María Diera, durante la celebración del Día de los Santos Patrones del Cuerpo Nacional de Policía -los Ángeles Custodios- que tuvo lugar ayer en el Monasterio de la Victoria de El Puerto.
«¿Creen que el fracaso escolar, o la falta de respeto entre alumno y profesores son fenómenos normales?», se preguntaba ayer el comisario ante un auditorio en el que se reunió toda la familia policial, además de las autoridades civiles y militares de la provincia. Jose María Deira buscaba así las causas de esta criminalidad juvenil en un problema más social que policial. Y atribuyó el fenómeno a la falta de «respeto y disciplina» en la educación, además del excesivo peso que -a su juicio- tiene la «libertad individual» en la balanza con respecto a la «seguridad colectiva»: «Estamos ante la ópera magna de la sociedad de la intolerancia», se quejó el comisario. «Es precisa una serie de medidas legislativas, judiciales, sociales y educativas que permitan abordar este fenómeno en toda su complejidad».
Saucedo pide medidas
No fue Deira el único que hizo referencia ayer a la delincuencia juvenil y a su preocupante incremento. Lo retomó el subdelegado del Gobierno en Cádiz, Sebastián Saucedo, que también llamó la atención sobre esto y exigió «una serie de medidas legislativas, judiciales, sociales y educativas que permitan abordar este fenómeno en toda su complejidad». Según recordó Saucedo, la criminalidad entre los menores no se limitan a pequeños hurtos o a infracciones menores, sino a delitos graves. Y puso como ejemplo la sucesión de incendios de vehículos que tuvieron lugar en la capital en primavera, cometida por una docena de jóvenes. O las peleas callejeras y los robos a punta de navaja que llevaron a los calabozos este año a una veintena de jóvenes en Jerez. A pesar de todo, Saucedo destacó «el descenso de la tasa de criminalidad» en la provincia.