Manuel Fernández responde a las acusaciones de Fran

Las palabras del joven centrocampista sanluqueño Francisco José Rodríguez publicadas el miércoles en este medio han colmado el vaso de la paciencia de la directiva del conjunto atlético, sensiblemente dolida por la actitud que ha tomado el jugador y su entorno en este caso.

Manuel Fernández, presidente de la entidad, ofrecía su versión de los hechos y subrayaba que «el Sanluqueño nunca ha cortado las alas a ningún futbolista, y ni mucho menos ha chantajeado ni extorsionado a nadie. Esas son palabras muy fuertes que no se pueden decir a la ligera, porque hacen daño a la imagen de un club con 62 años de historia».

Asimismo, aclaraba que «el jugador no ha sido apartado del equipo en ningún momento. Entrena cada día con el resto del grupo, pero no está disponible para el entrenador porque está declarado transferible. No tenemos culpa de que no haya llegado por él ninguna oferta verdaderamente interesante».

Fernández comenta que Fran «hizo pruebas en Alcorcón y, cuando fue a Écija en verano, fijamos un contrato con él y su representante -José Amorós- por el cual, si no se quedaba en el equipo, estaría un año más con nosotros. Todos estaban de acuerdo y en ese momento ya sabían que se le debía dinero, tanto a él como a los demás jugadores. El club trata igual a todos los futbolistas de sus características. Los sub 23 firman dos años y la cláusula de rescisión la fijamos en 9.000 euros. Con él se tuvo incluso el detalle de bajarla hasta 6.000. Un acuerdo con el que todos estaban satisfechos y que ahora se han saltado a la torera y lo están incumpliendo».

Indisciplina

Destapada la liebre, el presidente del Sanluqueño llega más allá y revela que no es el club el que no ha cumplido con el futbolista, sino todo lo contrario. «Dice que no lo dejamos entrenar y no es así, él está con el resto del grupo. Es más, es él quien ha incumplido la disciplina del club en varias ocasiones. La semana pasada jugó un partido de fútbol playa con un equipo de aquí de Sanlúcar sin nuestro consentimiento. Además, está ejerciendo de entrenador de un equipo de otro club, cuando eso federativamente está prohibido. Lo hace sin ficha y lleva desde el año pasado, a pesar de que se le ha advertido en varias ocasiones. Está montando una historia que no le beneficia en absoluto. Se está dejando llevar por el entorno. El lunes recibimos amenazas del padre y se le denunció por agresiones y amenazas».

Sobre la oferta recibida por parte del Puerto Real, comenta que «se le propuso que viniera un jugador suyo cedido a cambio de Fran. No aceptan estas condiciones y nos ofrecen un pago diferido. Lógicamente, tal y como está ahora mismo la cosa, no aceptamos esa forma de pago. Pero aquí a todos los chavales se les trata de la misma forma. En ningún momento se presiona a nadie».