A la segunda... ruptura

Lo apuntábamos ayer a propósito de la crisis en el matrimonio de Carolina de Mónaco. Nada como un verano en familia para echar a correr en septiembre a por los papeles del divorcio. En ésas andan Belén Esteban y Fran.

Ésta es una pareja extraña porque siempre que se enfada lo hace con cariño. Ahora Belén anuncia en el plató-confesionario que se separa de Fran. Debe de ser un poco masoca, porque rompe la relación «muy enamorada» de su marido y «queriéndole mucho». «Pero en la vida tienes que hacer cosas y por ahora, la ruptura está», comentó enigmática la Esteban. Aunque en la primera entrega televisiva del divorcio desveló lo justo, Belén se confesó dolida «porque Fran piense en esas cosas y se coma la cabeza», aunque no ahondó en qué cosas son ésas. Engordando el enigma, dice Belén que le ha cambiado la vida en un instante. «Hace un mes estaba en la playa tan feliz, os lo juro, y me duele mucho esta situación porque estoy muy triste». Una situación que, en todo caso, no es nueva porque ya en abril la pareja hizo el amago de irse cada uno por su lado. Ella volvió a casa de sus padres y le envió a Fran las maletas con la ropa al bar que él regenta. Entonces tenían «problemillas» que resolvieron en pocas semanas. Luego se fueron juntos de vacaciones y ahora llega la ruptura definitiva. Claro que duele, pero no se acaba el mundo. «Como me dice mi amiga Marisol, pues hija, a ver quién viene ahora...»