«Estoy viviendo un momento precioso, me he despojado de mis fantasmas»

Tras varias décadas consagradas al pop, la que fuera la voz indiscutible de toda una generación regresa con un disco de versiones en clave jazzística y acompañada de músicos de alto nivel como Chano Domínguez, Perico Sambeat o Jorge Pardo. Todo un lujo para Sole Giménez.

-Muchos la consideran una de las voces con más personalidad de la música española. Esa etiqueta, ¿pesa mucho?

-No sé qué decir (risas) porque no lo vivo así. Es más, muchas veces dudo de mi talento.

-Cuesta mucho cuidar la voz después de varias décadas en la profesión.

-Personalmente, no. Quizá porque es parte de mí y mientras yo me encuentre bien, la voz la tendré bien. Cuando tengo más problemas de tipo psicológico, se nota en la voz. Pero como tengo una actitud positiva ante la vida, eso lo recoge también la voz.

-'Dos gardenias' es su tercer álbum tras dejar Presuntos Implicados pero, ¿aún le cuesta desprenderse de su pasado?

-Acepto con alegría el hecho de que me relacionen con el grupo. Veintitrés años no se pueden pasar por alto, pero ya ha pasado. No obstante, no puedo renegar de mi pasado. Este disco distingue aún más mi música de la de Presuntos. Tiene personalidad por si solo.

-Ésta no es su primera incursión en el jazz...

-Estuve jugueteando un poco, pero es la primera vez que hago un disco de latin jazz y he disfrutado mucho en la grabación, así que no creo que sea el último. Lo que quería es tener la excusa para subirme al escenario con grandes músicos de jazz (ríe).

-De las versiones que llenan este álbum, ¿con cuál se queda?

-Yo vengo a ofrecer mi corazón, porque es una canción muy necesaria hoy en día. Nos miramos demasiado el ombligo y hay demasiados problemas en el mundo que podrían solucinarse si pusiéramos de nuestra parte. El tema dice 'quién dijo que todo está perdido, yo vengo a ofrecer mi corazón'.

-Dedicó 'Alma de blues' a Billie Holliday. ¿Qué es lo que más admira de ella?

-Su capacidad de improvisar y personalizar las canciones. Su forma de interpretar era única. Me hubiera gustado mucho vivir la época que ella vivió. Fueron años de eclosión creativa.

-Hablando de féminas, ¿cómo ve el papel de la mujer en el panorama musical?

-Hay muchos grupos encabezados por mujeres pero no las hay en los altos mandos de la industria, ni en las cadenas de radio...

-Las actrices maduras se quejan de que llegada una edad no les ofrecen papeles interesantes, ¿eso ocurre en la música?

-Me imagino que sí, pero yo no me encontrado ningún tipo de cortapisa. En la música se mira más el talento y no tanto la edad.

-Su anterior trabajo, 'La felicidad', reflejaba un momento clave en su vida. 'Dos gardenias', ¿qué tipo de mujer refleja?

-Estoy viviendo un momento precioso, me he despojado de mis fantasmas. He podido desarrollar un proyecto en el que confiaba hace muchos años, lo he desarrollado con gente a la que admiro y tengo muy clara mi dirección.

-¿Qué música escucha?

-Jorge Drexler, Fito, Maná...Nuevas voces femeninas de jazz, y a Ella Fitzgerald, por supuesto.

-¿Qué nuevos proyectos tiene en mente?

-Ahora quiero dar a conocer este trabajo, tocar mucho...Ya llegará el momento de componer.

-Si pudiera elegir hacer un dueto con un artista, ¿con quién sería?

-Siempre he sido muy fan de Prince. También me gustaría con Caetano Veloso.

-¿Algún auditorio donde le haría ilusión tocar?

-En el Olympia de París. Nací allí y me gustaría volver cantando.

-¿Qué opina del frenesí que ha provocado internet en el mundo de la música?

-Es un frenesí pero también un declive. Se trabaja mucho en un disco para que luego la gente no lo apreciae y se lo quede gratis. Eso da al traste con nuestra profesión. Aunque no vamos a dejar de hacer música, nuestras condiciones son más precarias. Ahora la gente puede disfrutar de mucha música pero a costa del talento de mucha gente, a la que le va a costar destacar.

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