El jefe de obras dio la pista

El primero de los denunciantes, que puso a la Policía y a la Unidad Especial de Delitos con Violencia (UDEV) tras la pista de una posible fuga fue uno de los hombres más cercanos a Jenaro Jiménez: el jefe de obra de una de las promociones iniciadas por el empresario en Cádiz. Alguien que era algo más que un mero trabajador, pues se trataba de una persona de confianza y uno de sus más estrechos colaboradores.

Según fuentes cercanas a la investigación, esta persona acudió a la Policía al descubrir que no había sido dado de alta en la Seguridad Social por el promotor. Aunque también reveló que algunos proveedores de la obra se habían quejado de impagos y que Jenaro ha firmado pagarés que podrían incurrir en irregularidades.

Su denuncia se convierte en el hilo del que empieza a tirar la Policía para ir desmadejando los nuevos casos de posibles estafas y deudas, a través de decenas de llamadas a socios, familiares y clientes del empresario. Finalmente, la UDEV reúne media docena de denuncias vinculadas con el empresario, que fueron remitidas al Juzgado Número 2 de Algeciras en junio de 2008. El juez algecireño continuó investigando los negocios de Jenaro, en cuya instrucción siguieron apareciendo nuevos supuestos fraudes a acreedores, además de supuestos documentos y firmas falsas. En junio de 2009, otra denuncia en Cádiz inicia una nueva vía de investigación en el juzgado número 4 de la ciudad.