La crisis no puede con las ganas de fiesta
Los supermercados se llenaron durante la jornada de ayer, ya que hoy permanecerán cerradosMiles de kilos de carne han sido adquiridos para brasearlos en las barbacoas del Carranza. Sin embargo, la verdadera protagonista es la brocheta moruna
| CÁDIZ Actualizado: GuardarLos trozos de carne aguardan ya en los frigoríficos de los hogares gaditanos a ser ensartados en las brochetas; los refrescos y, sobre todo, muchos litros de alcohol, copan el espacio de los congeladores, y en los coches la tizne delata que el carbón espera a ser encendido en una de las noches más largas del calendario festivo local. Muy pocas horas restan para que estalle la mecha de las barbacoas 2009, puede que a estas horas ya haya algunas chispas y lo que a buen seguro apenas queda es espacio libre, entre el Cementerio y la calle Sirenas, para instalar tanto bártulo.
Todo listo, hasta los bolsillos. Protagonista de todos los mentideros, la crisis ha ocultado su guadaña durante esta semana y ha permitido que las cajas registradoras de hipermercados, supermercados y otras tiendas de alimentación estén repletas.
No rebosan debido a la coincidencia de la celebración de las barbacoas con el día festivo, lo que ha obligado a muchos establecimientos a cerrar justo en la franja horaria en la que habitualmente facturan más. Y si ninguno logra hacer su particular agosto es porque entre todos se reparten el pastel de las ganancias. Se calcula que las fogatas que plagarán esta noche la playa de la ciudad le ha costado, de media, 10 euros a cada persona.
El dato es similar al de años anteriores y aunque habrá que echar un vistazo el lunes a los almacenes y cámaras frigoríficas de los supermercados, lo cierto es que en la víspera sus responsables estaban tranquilos.
Sobre todo, beber
En el Carrefour de San Fernando se habían vendido el jueves 100 barbacoas del modelo más barato. El hipermercado, por el que pasan a diario 5.000 personas, habilitó en su entrada principal tres neveras, o lo que es lo mismo, un muestrario de los elementos básicos de una barbacoa. Unas promociones que dañan sobre todo al pequeño comerciante. «No notamos tanto la crisis como la presencia de grandes supermercados, tienen ofertas muy agresivas», comenta un empleado de la carnicería de La Laguna.
De todas maneras, el pinchito, la hamburguesa y la ristra de chorizo se ven cada vez menos por la arena. Han usurpado su lugar los botellines de cerveza, los vasos de tubo y las petacas de alcohol. «A lo largo de la semana hemos vendido los productos no perecederos y ya el último día, los cárnicos», apuntan fuentes de Mercadona. «Prestamos un servicio diario y cuando se acerca un evento importante dirigimos todos nuestros esfuerzos en satisfacer al cliente. Haremos unos números parecidos a los de años anteriores», cuentan desde el supermercado. «Ganaremos menos porque, por ejemplo, no podremos vender hielo ya que no abrimos el sábado», lamenta Ramón, encargado de Supercerka.
En el Súper Cádiz de García de Sola resuena la misma queja. «Al no abrir, perderemos algunas ganancias. Otros años hemos tenido más jaleo». El presupuesto destinado a una noche de disfrute está ya quemado y los problemas económicos son, por unas horas, pasto de las brasas.