Los flamencos se apoyan en una sola pata para regular su temperatura corporal
| MADRID Actualizado: GuardarDos científicos de la Universidad de San José en Filadelfia (Estados Unidos) han descubierto que la razón por la que flamencos apoyan todo el peso de su cuerpo en una sóla pata «no es arbitraria», sino que forma parte de un mecanismo dirigido a regular la temperatura de su cuerpo, conservar el calor en el agua, ahorrar energía y defenderse de los depredadores.
Según recoge la BBC, para los expertos en psicología comparativa, Matthew Anderson y Sarah Williams, resultaba «fundamental» dar respuesta a «uno de los mayores enigmas de la naturaleza» y encontrar una explicación lógica a la «curiosa» posición que adopta esta especie. Para ello, el equipo dedicó varios meses a observar con detenimiento los hábitos de los flamencos caribeños que permanecían en cautividad en el zoo de Filadelfia.
Así, detectaron que al mantener una de sus dos patas recogida, estas aves «reducían sus niveles de fatiga y conseguían ahorrar mucha más energía». Además, descubrieron que, con ello, los flamencos tenían «mucha más facilidad» para escapar de los depredadores con rapidez, pues acortaban el tiempo necesario para emprender el vuelo en caso de emergencia. «Estas son los motivos principales por los que mantienen ese extraño equilibrio», apuntaron los científicos.
Por otra parte, aunque sus observaciones revelaron que este animal no tiene preferencias sobre cuál de sus patas escoge como punto de apoyo, cuando repliega la cabeza, «se decanta siempre por hacerlo en el mismo sentido». «El lado hacia el que hace girar su largo cuello determina el grado de agresividad o tranquilidad de ese ejemplar en concreto con respecto al resto del grupo», explicaron.
Más habitual en el agua
No obstante, descubrieron que los flamencos adoptan este mecanismo «con mayor frecuencia» cuando están en el agua que sobre la tierra. Con ello, los investigadores aseguran que estas aves pretenden mantener la temperatura cálida de su cuerpo, pues si apoyasen ambas patas el frío del agua, «perderían rápidamente el calor acumulado durante horas». «Tenemos pruebas definitivas de que la termorregulación es una función principal de este ave», confirmó Anderson.