«Me ofrezco para llevarte al aeropuerto»
Actualizado: Guardar«Hola a todos, tengo una Hiundai H1 con la que me ofrezco hacer pequeños portes, mudanzas, traslados al aeropuerto...» «Trabajo en aeropuerto de Jerez, busco trabajo. Soy dinámico y puntual». «Taxi largo recorrido». Colgar un anuncio en el que se ofrece un servicio con una contraprestación económica es un práctica muy extendida y, por supuesto, irregular. Cuando la oferta interfiere en el desempeño del trabajo de otros, autorizados para ello, corresponde a un ejercicio ilegal. Pirata, en el argot popular.
Los conductores con licencia de taxis de Jerez llevan años denunciando el intrusismo laboral del que son testigos a diario en el aeropuerto. Además de la tradicional competencia de los autobuses, también furgonetas sin tarjeta de transporte ni seguro para viajeros, particulares de otras localidades próximas, o taxis legales procedentes de otros lugares y que incumplen la normativa establecida para poder dejar y recoger usuarios en la terminal forman la principal amenaza para este gremio. Pero es sin duda en internet donde los piratas han encontrado un filón para hacer negocio.
La mayoría de las propuestas para el traslado del aeródromo que se encuentran en la red son breves y están insertas en una oferta mayor. La ilegalidad impide mostrarse a cara descubierta y los números de teléfono que se dejan no suelen ser los del móvil personal. Este periódico ha realizado algunas llamadas y se ha encontrado, eso sí, con las mismas tarifas a las fijadas por las administraciones, colectivos de taxistas y asociaciones de usuarios. Un conductor anónimo se ofreció a llevar a cuatro personas, con todas sus maletas, desde la puerta del aeropuerto (con un cartel identificativo, contaba) hasta el centro de Cádiz por 51 euros, en el caso de las jornadas laborables y por 61 en fin de semana. Inmediatamente y, sin presión alguna, redujo su oferta. «Lo dejo en 50 cuando sea y el cliente que me dé de más lo que le parezca», dijo nervioso.
Tour para ‘guiris’
Otros conductores ilegales van más allá y no se conforman con servir de taxi para moverse entre aeropuerto y ciudad, sino que cierran, una vez han recogido al usuario, el resto del paquete. Esto es, se ofrecen como guías turísticos o como chófer para su estancia en la provincia, «sobre todo a guiris», cuenta uno de los piratas. «Esto es un continuo y no se acaba, porque ya lo hemos denunciado ante la Junta de Andalucía, ante la alcaldesa de Jerez y hemos hablado incluso con la dirección del Aeropuerto, hemos tratado con todo el mundo y no hay respuesta, esto sigue cada vez peor», reconocía esta misma semana Francisco Moreno, secretario de la Asociación de Taxistas de Jerez.
Los de Cádiz, por el contrario, dicen no haber registrado todavía ninguna incidencia en los servicios, ni conocer a ningún conductor pirata. «Pueden ir un día, pero al siguiente ya lo tienen fichado, Si se da el caso con algunos que trabajan para una empresa que los respalda, pero nada más», comente José Jiménez, de Radio Taxi. Los conductores con licencia se quejan también de la extensión de estos fraudes en el puerto de Algeciras donde los inmigrantes tratan de subir a sus vehículos a los usuarios que desembarcan allí procedentes del otro lado del Estrecho. Mientras, los taxistas legales se quedan sin cubrir el servicio.
En cualquier caso, Facua provincial no tiene constancia de denuncia alguna de los consumidores por este práctica, quizá porque, a diferencia de lo que ocurre en otros aeropuertos como el de Sevilla o Madrid, donde los ilegales cobran más que lo que prescriben las tarifas oficiales, en Jerez contratar a un pirata sale barato.