Soñando voy

He soñado con una sociedad libre donde no existía la directiva europea de las 65 horas semanales, no había bancos con grandes beneficios, los ancianos eran felices y vivían con sus hijos, las mujeres decidían por sí mismas, los políticos ejercían su actividad en periodos cortos de tiempo, los ciudadanos tenían trabajo. No existían las pateras, ni el hambre en el mundo, ni armas químicas. El hombre llegaba a final de sus días con el abrazo de sus seres queridos y con una muerte digna. Cuando desperté y escuché la radio volví a nuestro mundo, o tal vez nuestro mundo es el del sueño y esta vida es una pesadilla que nos imponen esos pocos que gobiernan el mundo y nos han robado el derecho a soñar un mundo mejor.