La provincia se hace marinera

Según la tradición carmelita, la misma Virgen del Carmen bajó de los cielos para entregar su escapulario a San Simón Stock, uno de los padres espirituales de la comunidad. Conforme a esta leyenda piadosa, la Virgen se le apareció un 16 de julio de 1251. Ayer, Cádiz quiso celebrar el 758 aniversario del milagro paseando a la Reina del Monte Carmelo por las distintos mares y localidades de la provincia, demostrando su vinculación marinera y se devoción a la popular advocación de la Virgen María.

En San Fernando, las celebraciones comenzaron después de la misa dedicada a la Virgen que tuvo lugar en la carpa habilitada en el muelle de Gallineras, y que ofició el párroco del Buen Pastor, Pedro Gordillo. La imagen salió sobre las 19.30 horas camino del muelle para partir en la embarcación cedida por la Marina hacia el Paseo Marítimo de la Magdalena. El coro Virgen del Carmen fue el encargado de cantarle la Salve Marinera a la Señora.

Cientos de lugareños acudieron hasta las inmediaciones del muelle para acompañar a la Virgen. La Señora, que lucía el manto blanco y la saya que en su día le regaló Carmen Sevilla, estaba custodiada por las Salineras y por la banda de música Andalucía que puso las notas de la Salve a la tarde marinera, acompañando los vítores y las plegarias del pueblo de La Isla. A las ocho de la tarde, la procesión adquirió el carácter marinero que la caracteriza.

La peregrinación arrancaba desde el muelle camino del recinto ferial de La Magdalena, donde se realizó una ofrenda floral, pidiendo por aquellos que perdieron la vida en el mar, y se procedió a la bendición del sacerdote, para poner fin al acto y volver hasta su capilla sobre las 22:00 horas.

La Armada más carmelita

La Armada celebró ayer el día de su Patrona, razón por la que se engalanaron tanto los edificios como los buques. Pero el acto principal de conmemoración de la festividad se centró en la Escuela de Suboficiales (Esubo) de San Fernando con una misa, se procedió a la entrega de condecoraciones y se realizó el acto de despedida del personal que pasa a la Reserva.

A las 11.15 horas llegó el Almirante de la Flota, Juan Carlos Muñoz Delgado, que presidió el acto junto a la senadora socialista María Jesús Castro. Tras la oración marinera comenzó la misa conmemorativa que tuvo lugar en el Panteón de Marinos Ilustres. Un solemne acto que finalizó con la Salve Marinera en honor a la Estrella de los Mares.

Tras la celebración religiosa se procedió a la despedida del personal de la fuerza que pasa a ser reservista y a las condecoraciones de aquellos miembros de la Armada destacados por sus actos y a los que se les impusieron la Cruz del Mérito Naval.

La alocución del Almirante de la Flota dió paso al desfile de las unidades desplegadas, con el que se cerró este especial homenaje de la Armada a su Virgen del Carmen.

El Carmen en la Bahía

Estos actos no fueron los únicos que se celebraron en la provincia. En otros puntos de Cádiz la Estrella de los Mares brilló de forma especial. Así, Barbate vive también sus días grandes en estas Fiestas del Carmen 2009. Ayer, segundo día de feria, tuvo lugar una Eucaristía presidida por José María Raigadas, párroco de San Paulino. Desde el Puerto de la Albufera, embarcaba la Virgen en el pesquero Nuevo Nautilus para su salida procesional. Durante el recorrido se realizó la bendición del mar y las de las aguas.

La Hermandad del Carmen Atunera de Chiclana celebró el día grande de la Virgen con un programa cargado de actos que ocuparon tanto la mañana como la tarde de la localidad. Por la tarde, se procedió a la procesión marítima que salió de Sancti Petri con dirección a La Barrosa. Al finalizar, se celebró la tradicional misa de campaña, mientras que en el muelle se instaló una carpa en la que se sirvió comida y bebida para conmemorar a la Virgen. El otro punto de concentración fueron las calles del centro de la ciudad pues la Hermandad del Carmen de San Sebastián también procesionó con la imagen de la Virgen.

La Virgen del Carmen volvió a ser la reina de un municipio de tanta tradición pesquera como El Puerto. Con las calles engalanadas y buena temperatura, la junta de gobierno de la hermandad del Carmen, dirigida por Jacob Romero completó, con éxito su primera salida procesional.

Como cada mes de julio, la Reina del Monte Carmelo recorrió las calles del casco histórico tras salir de la parroquia que lleva su nombre y el de San Marcos rumbo al muelle de San Ignacio, junto al célebre Vaporcito. Allí se produjo el momento más emotivo de la jornada cuando, con la noche ya caída, la Patrona de los marineros se encontró con la otra Virgen, la que procesiona en barco por la Bahía y el Guadalete. Finalmente, la Virgen pudo embarcar después de que la Asociación de Armadores llegara a un acuerdo con la Capitanía Marítima, la entidad competente para autorizar todos los movimientos de barcos. Al parecer, la Hermandad no había solicitado permiso, escollo que se salvó al hacerse cargo la Asociación de Armadores de los posibles problemas que pudieran ocurrir.

Pese al susto, la celebración tuvo un final feliz. La Virgen volvió a su templo en torno a la medianoche acompañada de numeroso público y de las dos bandas locales: la de cornetas y tambores Cristo del Amor (que abrió el cortejo) y la del Maestro Dueñas, poniendo punto y final al día en el que la provincia de Cádiz se hizo carmelita.