EDUCACIÓN MIXTA. Entrada de un colegio donde estudian niños y niñas. / C. CHERBUY
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Aulas con diferentes sexos

En la provincia sólo existen cuatro colegios que separan a niños de las niñas Existen argumentos enfrentados sobre la eficacia del sistema diferenciado frente al mixto

| CÁDIZ Actualizado: Guardar
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En la provincia sólo existen cuatro centros de índole privada, dedicados a la educación diferenciada, aquélla en la que se separan a chicos y chicas a la hora de impartir clases. En El Puerto están el Guadalete y el Grazalema, mientras que en Algeciras se encuentran el Montecalpe y el Puertoblanco.

El resto de colegios públicos y concertados de Cádiz mantienen la educación mixta, de forma que se encuentra muy restringida la opción de los padres para elegir el modelo educativo que consideren más conveniente. Recientemente la discusión entre las ventajas y desventajas de un tipo de enseñanza u otro han vuelto a surgir en la sociedad debido a la decisión del Gobierno de Cantabria de retirar la financiación pública a un colegio del Opus Dei que no escolariza a niñas. Por ello, cabe preguntarse ¿qué es mejor la educación mixta o diferenciada?

En este sentido se puede entrar en una guerra de números e informes que avalan a uno u otro modelo. La mayoría de expertos de la provincia abogan por una educación basada en la integración, también denominada coeducación, y el aprendizaje de valores sociales por los inconvenientes que puede acarrear una enseñanza sustentada en la competitividad. Además, aluden a que las cifras que se dan sobre la enseñanza diferenciada se recogen en informes sesgados. Tales estudios provienen de países como Gran Bretaña, Alemania o Suecia y son bastante claros en cuanto a los resultados.

Informes diferenciadores

Así, un estudio publicado por el periódico inglés The Guardian defendía recientemente que las alumnas que estudian en colegios sólo para chicas obtienen mejores notas que las que lo hacen en colegios mixtos: de hecho tres de los cuatro mejores colegios británicos son de los denominados single sex.

En EE UU un cambio legal en el año 2002 provocó una eclosión de nuevos colegios que han adoptado el modelo diferenciado. Por otro lado, en el ranking de las 50 empresarias más importantes de la revista Business Week, el 30% de ellas estudió en un colegio diferenciado.

También la revista Der Spiegel, abría su portada hace unos años con el siguiente titular: «¿Ha sido un error histórico la imposición de la educación mixta en Alemania?». En el interior, un estudio señalaba que cuando los alumnos y alumnas eran separados para recibir enseñanza, el interés y las calificaciones mejoraban de forma significativa en determinadas materias.

El Financial Times, por último, publica todos los años una lista de los colegios que han sacado las mejores calificaciones. Y los 25 primeros son colegios diferenciados.

Y en Australia se ofrece libremente educación pública tanto en colegios mixtos como diferenciados. Desde el año 2001, las matrículas en los colegios mixtos han bajado un 50% en favor de los colegios diferenciados.

Pero no hay que irse tan lejos, porque en Navarra se ha observado que son los colegios con educación diferenciada los que obtienen los mejores resultados en los exámenes de selectividad.

María Antonia Ortega es la directora del colegio Puertoblanco que recoge desde la educación infantil hasta el bachillerato. Para ella está claro que «la educación diferenciada atiende a una realidad evidente de personalidades distintas y capacidades educativas diferentes, unas necesidades que son atendidas en estos centros de manera distinta y adecuada a tales inquietudes».

Ortega, además, considera que los niños y niñas «prestan mayor atención» en clases diferenciadas «que si estuvieran en una clase todos juntos. La eficacia de tal enseñanza se puede observar en otros países».

Esta «eficiencia», sin embargo, es puesta en duda por las pruebas de diagnóstico de la Junta de Andalucía, tal y como señala el inspector de Educación Jaime Martínez, pues «en las mismas se demuestran que no hay una diferencia tan marcada. A lo mejor un pequeño porcentaje de chicos saca mejores resultados en Ciencias y Matemáticas y ocurre lo contrario en materias como en Lengua, pero hablamos de un 50,8% frente a un 48,2. Lo que sucede después es que generalmente en las evaluaciones las niñas sacan mejores notas, pero porque de ello dependen factores como el comportamiento, el respeto o la limpieza en los trabajos».

Año tras año, el informe Pisa, que analiza el rendimiento de estudiantes a partir de exámenes mundiales, suspende al sistema educativo español, pero según el Psicólogo y Logopeda Ramón Piñeiro, que tiene un centro integral en Cádiz y San Fernando, no es porque «tengamos un modelo mixto en vez de uno diferenciado, sino porque falla el modelo social; de hecho, Finlandia es el país que suele obtener mejores resultados y el modelo es mixto... Aunque su contenido programático dista mucho del español».

El principal argumento a favor de la educación diferenciada es, por tanto, que ésta tiende a mejorar el rendimiento académico de los alumnos. Aunque las críticas a la misma se sustenta en su inconveniencia, ya que no respeta las diferencias innatas entre el hombre y la mujer, mientras que por el contrario también se afirma que la educación diferenciada es discriminatoria y no se abre a la diversidad.

Esto último no lo comparte Lorenzo Cano, que pertence al grupo Attendis que gestiona el colegio Guadalete y que defiende que «el modelo diferenciado no es nuevo ni está fuera de la dinámica social de nuestros días. Es frívolo decir que el contexto colegial determinará de esta forma tan categórica el modelo social de integración. Al igual que tampoco se puede manifestar categóricamente que con él se obtienen mejores resultados académicos».

Igualdad de género

Los expertos aseguran que si la tendencia social se dirige hacia la potenciación de la igualdad de género no cabe el concebir un sistema educativo que separe en la infancia al hombre y la mujer. Mercedes Pacheco es orientadora-terapeuta en la empresa Ingenio y experta en la temática de género. A ella la educación diferenciada le parece un «esperpento porque si de pequeños abrimos brecha entre la convivencia de ambos sexos, difícilmente vamos a poder trabajar en un entorno de integración. Les estamos quitando la posibilidad de que acumulen experiencias de relación con el otro sexo, de que sepan desenvolverse, y en un futuro nos podemos encontrar con serios problemas por la falta de herramientas comunicativas entre un sexo y el otro».

En la educación diferenciada tales relaciones se exponen como necesarias, pero «en otros ámbitos fuera del centro en el que se estimula la enseñanza. Además se traen a personas que ostenta roles muy variados, por ejemplo arquitectas para que las niñas se desenvuelvan en un ambiente que no limite sus capacidade», expone Ortega.

Sin embargo, cada vez es mayor el tiempo que los niños pasan en los colegios: pueden «llegar a las siete y media de la mañana y marcharse a las seis de la tarde entre comedor y actividades extraescolares. Por ello, la capacidad de socialización de los centros es cada vez mayor y no se entiende que se quiera evitar algo tan común en la sociedad como son las relaciones entre los distintos sexos. Que las niñas tienen otro nivel de madurez, es cierto, pero no por ello debe apartarse de los niños de su misma edad, porque nos estamos saliendo de la igualdad. En un centro educativo se aprenden valores a través de la convivencia entre profesores y compañeros por el que aprendemos a comportarnos en la sociedad», asegura Salvador Gutiérrez, director del centro de primaria Reina de la Paz en San Fernando.

Piñeiro asegura que el peligro radica en «confundir la educación con la formación e instrucción, porque educar tiene un significado más amplio que la memorización de datos». Una postura en la que coincide Pacheco al asegurar que «los colegios son centros de socialización y no podemos dejar fuera de ellos la realidad social». En todo caso Ortega expone que en último término «se le debe garantizar a los padres la posibilidad de escoger la opción que consideren más beneficiosa para sus hijos».