«Nuestra labor ahora debe incidir en recuperar el prestigio de las letras»
Reelegido el miércoles, afronta esta nueva etapa con el reto de adaptar las titulaciones al Plan Bolonia
CÁDIZ Actualizado: GuardarManuel Arcila comenzó ayer su nuevo mandato como decano de la Facultad de Filosofía y Letras de Cádiz inmerso en continuas reuniones de trabajo. Algo más relajado que en la jornada electoral y con la satisfacción de haber sido elegido con claridad sobre el otro candidato al Decanato, Arcila afronta esta nueva etapa con «ilusión y con más compromiso si cabe», aseguraba. Sus principales retos están ligados a uno de los procesos más complejos a los que se enfrenta la Universidad en los próximos años: la adaptación de las titulaciones al Plan Bolonia.
-¿Cuáles son sus principales retos para afrontar una de las etapas más difíciles para la Facultad con la llegada del Plan Bolonia?
-Es cierto que estamos en un momento decisivo para la universidad en general y para la Facultad de Filosofía y Letras en concreto. Por este motivo, nuestros principales objetivos serán tres principalmente. En primer lugar, terminar el diseño de los grados y los masters; en segundo lugar, la implantación de los mismos y, en tercer lugar, dar a conocer esta estructura a los ciudadanos. Una de las tareas fundamentales ahora es incidir en recuperar el prestigio de las letras e informar a la sociedad de la importante labor que éstas tienen. como decía nuestro eslogan, dar valor a las letras.
-¿De qué manera va a afectar Bolonia al mapa de titulaciones de la Facultad?
-En principio, Bolonia no tendría por qué afectar a los títulos, aunque es verdad que las medidas tomadas por nuestro Gobierno podrían influir. No obstante, se ha llegado a la solución de mantener el mapa de titulaciones actual pero con estructuras comunes. En principio, están garantizados los ocho títulos que tenemos aunque en algunos de ellos se hará un primer curso común. Y en general va a afectar en la medida que nos enfrentamos a un nuevo cambio metodológico y a un cambio en la estructura de los estudios. Se trata de una forma diferente de entender la universidad.
- Además de la adaptación a Bolonia, la Facultad se enfrenta también al problema de la disminución de matriculaciones, ¿a qué se debe esta tendencia?
-En general, hay que tener en cuenta que una parte importante de las titulaciones ha disminuido en el número de matriculaciones por una cuestión demográfica. En nuestro caso, esto se ha producido por el desprestigio social que han sufrido las letras porque aseguran que tienen pocas salidas laborales. Sin embargo, en los próximos años se verá que las industrias culturales van a asumir a muchos de los profesionales que han cursado estas carreras. Esto nos puede ayudar a recuperar alumnado. También es importante pensar que por lo que significan las letras para la sociedad, no habría que mirar el número de alumnos.
-¿Qué papel va a jugar la Facultad en una conmemoración tan ligada a las letras como el Bicentenario?
-El 2012 es muy importante para Cádiz y para la Facultad porque hay que tener en cuenta que una gran parte de los eventos que se van a celebrar tienen que ver con la Historia y la cultura. De hecho, nosotros tenemos numerosos grupos de investigación que están trabajando en ello y profesores como Ramón Vargas Machuca o Alberto Ramos que forman parte de la Comisión del Bicentenario. Una de las iniciativas de la Facultad es crear una red de facultades de letras latinoamericanas y celebrar algún acto de cara al Bicentenario.
-¿A qué cree que se debe el importante apoyo que ha recibido en las elecciones?
-En primer lugar, tengo que decir que me produce satisfacción y más compromiso. Además, es de agradecer que se haya presentado otra candidatura. La alta participación deja al descubierto que estamos en una Facultad viva.
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