La mala imagen de Woody

Cuando Woody Allen demandó a una empresa de ropa por utilizar su imagen sin permiso no esperaba que la firma respondiera con lo que los abogados del cineasta han descrito como «una bajeza». La compañía tiene pensado airear la vida privada del director y actor como alegato para ganar el juicio, previsto para la próxima semana. El argumento de los abogados de America Aparel Inc. viene a ser que con sus anuncios, en los que salía el actor y director caracterizado como un rabino ortodoxo, no podían dañar la imagen de Allen porque él mismo ya la había estropeado bastante con sus escándalos sexuales. Así, la empresa pretende sacar del baúl de los malos recuerdos el enfrentamiento que tuvo el director de 'Vicky Cristina Barcelona' con su entonces mujer Mia Farrow cuando salió a la luz el romance que había iniciado con la hija adoptiva de ésta, Soon Yi. «Woody Allen exige siete millones y medio de euros por el uso de su imagen en vallas que se montaron y bajaron en menos de una semana. Yo creo que Woody Allen sobrestima el valor de su imagen», afirmó Stuart Slotnick, abogado de la firma demandada, para quien aquel escándalo matrimonial acabó con el buen nombre del cineasta. A pesar de lo grueso de la jugada, Slotnick espera llegar a un acuerdo y evitar el juicio.