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El asesino confeso de Marta intenta suicidarse con el cordón de su chándal en la cárcel de Morón
Su 'interno-sombra' dio la voz de alarma aunque fuentes penitenciarias sospechan que fue una forma de llamar la atención
SEVILLA Actualizado: GuardarEl principal imputado por la desaparición y muerte de Marta del Castillo, Miguel C.D., intentó ahorcarse ayer en la cárcel de Morón de la Frontera (Sevilla) con el cordón de su propio chándal, aunque la intervención de los presos más cercanos al recluso, especialmente de su 'interno-sombra', y del personal de la prisión evitaron que se provocara heridas.
Los hechos ocurrieron, tal y como adelanta en su edición de hoy El Correo de Andalucía, en torno a las 20,00 horas, cuando el presunto autor de la muerte de Marta fue al servicio antes de ir a cenar e intentó acabar con su vida. El 'interno-sombra' que siempre le acompaña se extrañó de su tardanza y comprobó que se había colgado de un cordón, de manera que dio la voz de alarma. Los funcionarios de prisiones actuaron con rapidez, por lo que Miguel no llegó a provocarse lesiones. Antes de intentarlo, fuentes penitenciarias han desvelado que el presunto asesino de Marta dejó una carta en su celda, que ha custodiado el director de la cárcel hasta su entrega, por parte de agentes de la Policía Judicial, en el juzgado de instrucción 4 de Sevilla, que investiga la muerte de la joven.
Las mismas fuentes han precisado que el intento de suicidio fue, aparentemente, una forma de llamar la atención, ya que el encarcelado intentó ahorcarse con un cordón de su chándal que colgó del quicio de la puerta de un baño que da a un patio de la cárcel. La puerta se encontraba abierta y el baño da al patio del módulo de ingresos y aislamiento, y por lo tanto se encontraba muy concurrido cuando se produjo el intento de suicidio, a la hora de la cena.
Programa de prevención de suicidios
Desde que ingresó en la cárcel de Morón de la Frontera (Sevilla), el pasado 17 de febrero acusado de la muerte de Marta del Castillo, Miguel está incluido en el programa de prevención de suicidios, en virtud del cual se encuentra acompañado de manera permanente por otro recluso. El día antes había permenecido internado en la prisión de Sevilla-I, pero el juez acordó su traslado para alejarlo del "foco" de los hechos, de la misma forma que fue trasladado a la cárcel de Huelva su presunto cómplice, Samuel B.P.
Por octavo día, el equipo desplegado en el centro de tratamiento de residuos de la Mancomunidad de Los Alcores, ubicado en la hacienda Montemarta-Cónica de Alcalá de Guadaíra (Sevilla), sigue con la búsqueda del cadáver de la joven sin hallazgos relevantes.
El equipo está integrado por dos agentes de la Policía Judicial, dos de la Policía Científica y otros dos del Grupo de Menores (Grume) del Cuerpo Nacional de Policía, apoyados por maquinaria y operarios dirigidos por los investigadores. Pese a que sigue sin haber avances, los agentes tienen claro que la zona del vertedero en la que se ha desplegado el equipo es la correcta: de las montañas de basura se han rescatado ejemplares de periódicos y revistas y otros objetos que, por su fecha, prueban que se trata del sector en el que habrían ido a parar los residuos recogidos aquella noche del 24 de enero en el entorno de la calle León XIII. Por este motivo los efectivos trabajan cada vez "con más cuidado" porque están en la certeza de que se trata de la zona correcta y, de ser cierta la última confesión de Miguel, se encontraría allí el cuerpo de Marta y no en el río Guadalquivir, donde estuvo buscándolo un dispositivo de más de doscientas personas durante un mes y medio.