Cuerpo a cuerpo

«En vez de apagar fuegos, a lo mejor se enciende alguno». Así se expresa Daniela, la stripper que provocó el escándalo en la cárcel de Picassent y con la que los bomberos de Valencia honrarán el próximo 8 de marzo a su patrón, San Juan de Dios. Claro que la jornada coincide con el Día Internacional de la Mujer, una circunstancia que, a buen seguro, dará mucho que hablar.

La idea de hacerse con los servicios de Daniela surgió hace unos meses. «Esta chica dio un golpe muy bueno con lo de la cárcel. Y pensamos... Vamos a ver si la podemos contratar», explica Alejandro Carabal, portavoz de la comisión de fiestas de los bomberos. Y lo que sólo era una idea ya es una realidad.

Aunque ninguna de las dos partes quiere hablar de dinero, la popularidad de Daniela ha subido como la espuma desde su actuación en el penal valenciano. «Mi caché se ha multiplicado por cuatro», admite la bailarina, al tiempo que anuncia sorpresas para presentarse ante los, al menos, 150 miembros del servicio de extinción de incendios que acudirán a la comida. «Tengo que buscarme un traje de bombero», adelanta. Será un detalle con su público.

La stripper, de 36 años, no oculta sus «ganas» de animar a los bomberos y advierte: «Me voy a explayar». Y confiesa que su actuación ante los presos no fue todo lo natural que debía. «Si lo hubiera sido ¡me dejan presa a mí! » bromea. Lo cierto es que esta vez promete ser generosa, primero porque sus clientes son de Valencia, algo que ella tiene muy en cuenta ahora que se ha convertido en estrella nacional.