La cacería del ministro y el juez enfrenta al Gobierno y el PP

El Gobierno había actuado hasta ahora con calculada prudencia ante los avatares internos del PP, pero ayer entró de lleno en la crisis ante las acusaciones a propósito de la coincidencia el fin de semana en una cacería del ministro de Justicia, Mariano Fernández Bermejo, y el juez Baltasar Garzón. El Ejecutivo considera que el partido opositor está desesperado y trata de extender «una cortina de humo» para distraer la atención de su enrevesada situación interna.

Con la noticia de la jornada cinegética en boca de todos los diputados, la sesión parlamentaria de control se caldeó nada más empezar. Aunque ni José Luis Rodríguez Zapatero ni Mariano Rajoy la abordaron, el presidente sí aprovechó las críticas a su equipo económico para sugerir al líder de la oposición que piense primero en los cambios internos por los casos de espionaje y la trama de presunta corrupción

La montería asomó en el debate entre la vicepresidenta y la portavoz del PP Soraya Sáenz de Santamaría. La diputada denunció que Fernández Bermejo estuviera de cacería «con quien no debiera» el mismo fin de semana en que Garzón puso en marcha la operación. María Teresa Fernández de la Vega evitó responder al envite, pero auguró que los populares se van a «hundir» ante «la marejada» interna que soportan.

El Gobierno acabó por subir el tono tras calificar Rajoy la cacería conjunta como acto obsceno y anunciar la ruptura de relaciones con Justicia. Fernández Bermejo minimizó su coincidencia con Garzón, con el que, dijo, «apenas habló» y «en absoluto» de la operación judicial; y a continuación, con lenguaje propio de una batida, sostuvo que las manifestaciones del líder de la oposición demuestran que ha optado por «disparar contra el Estado de Derecho». El problema, prosiguió, es que los populares no se han sacudido «el prisma histórico del que son herederos» y creen que una cacería es como 'La Escopeta Nacional', la película de Berlanga sobre una montería a la que acudían Franco, sus ministros y empresarios para hacer negocios.

Fernández Bermejo se las tuvo tiesas también con el dirigente del PP Federico Trillo, quien dijo que el ministro y Garzón forman un dúo en el que «uno apunta y el otro dispara» contra su partido. Trillo señaló que la presencia de ambos en la montería constituye «el mayor atentado contra la independencia judicial en la historia de España» y el titular de Justicia aseguró que «jamás» ha hablado «con un juez de algo que estuviera bajo su jurisdicción». Lo que ocurre, dijo, es que «ustedes tienen un lío monumental, un espectáculo de PP contra PP» que quieren resolver con «la dimisión de don Mariano, pero qué Mariano», ironizó a propósito de que él y Rajoy comparten nombre.