ACUÍFERO. El agua desembalsada ayer de Guadarranque fue a parar a los acuíferos de la zona. / ANDRÉS CARRASCO
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Los pantanos gaditanos comienzan a desembalsar agua

Guadarranque desaloja cuatro hectómetros cúbicos, el equivalente al consumo de todos los gaditanos en 18 días

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Las precipitaciones de los últimos meses han permitido que los pantanos de la provincia acumulen un tesoro de agua que servirá para garantizar el abastecimiento de varios años. Sin embargo, los técnicos de la Junta de Andalucía no dejan que el nivel de agua en los pantanos se acerque a un punto cercano al límite. Por motivos de seguridad, los embalses deben mantener desocupado un 10% de su capacidad. Una tromba de agua que llegara cuando falta poco para que un pantano se desborde podría dar lugar a una catástrofe. Así pues, cuando se habla de que una balsa de agua controlada está al 100% de su capacidad, lo que en realidad se dice es que su volumen ha alcanzado el máximo que la seguridad aconseja, aunque aún podría acoger mucha agua.

Por esta razón se alivió la infraestructura hídrica de Los Hurones hace unos días y en la jornada de ayer se hizo lo mismo en el embalse de Guadarranque. La Agencia Andaluza del Agua cifró en cuatro hectómetros cúbicos (cuatro mil millones de litros) el volumen desalojado. Esta cantidad sería suficiente para llenar 1.600 piscinas olímpicas o para abastecer el consumo de todos los hogares de la provincia durante algo más de 18 días, en función de los datos de consumo por habitante y día del último estudio realizado al respecto por el Instituto Nacional de Estadística.

Fuentes de la Delegación Provincial de Medio Ambiente de la Junta en Cádiz explicaron que, aún teniendo en cuenta que se desaloja por motivos de seguridad, el agua vertida desde este pantano no se desperdicia por completo por ir a parar al río Palmones y, de ahí, al mar. Se trata de una zona de roca porosa y en la que los acuíferos subterráneos abundan. De esta forma, el agua desembalsada sirve para nutrir estos embalses naturales que se encuentran bajo la tierra. Las mismas fuentes, sin embargo, también matizaron que la gran cantidad de precipitaciones caídas desde el inicio del año hidrológico en septiembre y especialmente en las últimas semanas podrían haber ocupado ya la oquedad de la piedra.

La Administración señaló que es probable que en los próximos días se tome también la decisión de rebajar el volumen de agua almacenada en el pantano de Charco Redondo en Los Barrios. Ya supera el nivel de seguridad y las previsiones meteorológicas apuntan a que continuarán registrándose precipitaciones en la zona que alimentarán aún más este embalse.