En la imagen, el lehendakari en marzo de 2007 cuando también tuvo que responder ante la Justicia./ Archivo
política

Patxi López está convencido de que el juicio «quedará en nada»

Responderá junto con Ibarretxe ante el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) por haber mantenido contactos con Batasuna estando ilegalizada, durante la tregua de ETA

BILBAO Actualizado: Guardar
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Ante una importante expectación y en una vista oral sin precedentes, mañana se sentarán en el banquillo de los acusados el lehendakari, Juan José Ibarretxe, los representantes del PSE-EE Patxi López y Rodolfo Ares, junto con cinco miembros de la izquierda abertzale: Arnaldo Otegi, Rufi Etxeberria, Pernando Barrena, Juan José Petrikorena, y Olatz Dañobeitia. Responderán ante el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) por haber mantenido reuniones con Batasuna estando ilegalizada, durante la tregua de ETA.

Pese a que se enfrentan a la petición de penas de prisión de entre nueve y cuatro años, en contra del parecer de la Fiscalía que solicita la absolución, los procesados se encuentran tranquilos. "No hemos cometido ningún delito", ha asegurado Patxi López. "Cumplimos con nuestra obligación, porque cualquier político tiene la obligación, cuando hay una oportunidad para conseguir la paz, como así creíamos que existía en aquel entonces, de intentarlo", ha espetado el secretario general de los socialistas vascos.

Convencido de que el juicio "va a quedar en nada", el líder socialista ha explicado que la reunión que mantuvo con los ex dirigentes de Batasuna buscaba "avanzar en el camino hacia la paz y hacer posible que el mundo que daba cobertura a la violencia se integrara en democracia". "Desgraciadamente, no fue posible porque ETA frustró nuestras esperanzas de conseguir la paz y acabar con la violencia", ha reconocido, al tiempo que ha subrayado que "hicimos lo que teníamos que hacer"v puesto que "o que no se nos hubiera perdonado y nosotros mismos no nos hubiéramos perdonado era no haber intentado avanzar hacia la paz".

En la misma línea se ha mostrado, Rodolfo Ares, quien acudirá "desde el convencimiento de que no cometíamos ninguna ilegalidad". "Defenderemos que era una acción política excepcional para intentar acabar definitivamente con el terrorismo", ha asegurado el dirigente socialista. Asimismo, ha asegurado que lo que trasladaron a las personas de la izquierda abertzale es que tenían que defender sus posiciones "a través de la política y que tenían que hacerlo alejados del respaldo y el apoyo a la violencia".

Apoyo incondicional al lehendakari

El resultado del juicio podría condicionar los propios comicios, ya que Ibarretxe y López, candidatos a lehendakari por el PNV y el PSE-EE, respectivamente, para las elecciones del próximo 1 de marzo, se enfrentan a una posible inhabilitación, y la sentencia previsiblemente se conocería antes de la campaña, que comenzará el 13 de febrero.

Consciente de ello, la Ejecutiva del PNV no ha dudado en mostrar su pleno apoyo a Ibarretxe. "El lehendakari hizo lo que tenía que hacer". "Además de legal, era ante todo su obligación" para intentar buscar la paz y la normalización política "mediante el diálogo", por lo que expresa su "aliento y respaldo" al imputado, ha manifestado la organización del partido en un comunicado.

Por ello, la Ejecutiva arropará mañana al lehendakari ante el inicio del juicio y así, simbólicamente, "todo el cuerpo social del Partido Nacionalista Vasco" se sentará junto a Ibarretxe en el banquillo, "fundidos en una sola persona".

"Todo es una farsa"

Para el ex portavoz de Batasuna, Arnaldo Otegi, el juicio es "esperpéntico" y responde a "una farsa". A su juicio, está clara "la actitud antidemocrática que desde hace 30 años está teniendo el Estado español", y que quedará patente mañana ante "periodistas y observadores internacionales" cuando estos vean que a "personas que buscan soluciones mediante el diálogo se les mete en la cárcel simplemente por hablar". Según Otegi, "un juicio de esta naturaleza es posible en España por su escasa historia democrática, pero frente a ese diseño, la mayoría popular de Euskal Herria aspira a superar esa naturaleza y crear una auténtica democracia".

A juicio de Otegi, "para mantener esta política antidemocrática, el Estado ha utilizado la fuerza; la cárcel, la tortura y el asesinato", añadiendo que "cuando falta la democracia se usa la fuerza, como se ha hecho con el pueblo vasco". Para el dirigente de Batasuna, "mañana se juzga que hablar es algo perseguible en el Estado español, pero todo el mundo sabe que tarde o temprano se tiene que producir el diálogo" porque a su entender, "los problemas políticos se resuelven políticamente, de ahí que reclamemos el diálogo".