Palin, abuela a los 44
El de Bristol Palin, la hija adolescente de la gobernadora de Alaska, Sarah Palin, ha sido sin duda uno de los embarazos más sonados de 2008. El culpable de tanta celebridad fue el candidato a la presidencia de Estados Unidos, John McCain, que puso sus ojos en la señora Palin -antigua reina de la belleza, amante de la caza y, como ferviente creyente, contraria al aborto- como su candidata a la vicepresidencia. La obligó a reconocer públicamente, dos días después de su nominación, que su hija mayor, con apenas 17 años y soltera, estaba esperando un hijo: «Nuestra querida hija Bristol ha llegado a casa con una noticia que, como padres, sabemos que la hará crecer más rápido de lo que habíamos planeado». Semanas más tarde llegó la boda entra la joven y su novio. Y poco después el triunfo de Obama y el consiguiente retiro de Sarah Palin a sus cuarteles de invierno en la lejana Alaska.
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La revista People prepara ahora una exclusiva mundial con fotografías del hermoso niño que acaba de nacer junto a los padres. Un reportaje que vale millones y permitirá a la joven pareja, todavía estudiantes, afrontar el futuro con más holgura. Bristol aún no ha terminado sus estudios de bachillerato, mientras que su marido toma cursos de electricista. El bebé pesó al nacer 3,3 kilos y tanto la mamá como el niño se encuentran en perfecto estado.
Durante la reciente campaña presidencial, Sarah Palin, tuvo que hacer un gran esfuerzo para evitar que la noticia del embarazo de su hija perjudicara su imagen. Los medios llegaron a especular con la posibilidad de que la gobernadora no hubiera dado a luz a Trig, el hijo menor de tan sólo 7 meses y con síndrome de Down, sino que la verdadera mamá fuera su hija Bristol. Varios sitios web publicaron fotografías de una esbelta y delgada Sarah Palin en los meses anteriores al nacimiento de Trig, con la intención de demostrar que no estaba embarazada. El equipo de la campaña de MaCain reconoció entonces que la candidata a la vicepresidencia hizo el anuncio de que su hija estaba en cinta para acallar la espiral de rumores que se había desatado. Incluso algunos miembros de su equipo se quedaron sorprendidos del anuncio del embarazo. El principal periódico de Alaska, The Anchorage Daily News, publicó un artículo en el mes de marzo, día antes que naciera el pequeño Trig, indicando que «simplemente la gobernadora no parece embarazada».
