«Tengo muy claro que nadie puede decir que no he sido honrado con el Xerez»

Acaba 2008 y con él uno de los años más complicados para el xerecismo. El conjunto azulino finaliza los doce meses en la zona alta de la tabla y siendo el tercer equipo, empatado a puntos con la Real Sociedad, que mayor cantidad de puntos ha logrado (64 puntos), dos menos que Las Palmas. Los jugadores, junto a técnicos y afición, recordarán 2008 como el año del milagro de la permanencia, y uno de los buques insignias de aquel logro analiza estos doce meses para LA VOZ.

Miguel Ángel Rondán se podría poner muchas medallas una vez acabado este año, en parte para olvidar. Lejos de eso, El Capi, que crea filial y fobias, apuesta por la humildad del trabajo y la ilusión de un ascenso.

-En este año 2008 que está a punto de concluir, ¿ha podido descansar Miguel Ángel Rondán?

-De momento no me han dejado. La verdad es que desde que entré en el Xerez, afortunadamente, como en cada verano, que era cuando yo iba a tener vacaciones, me cambiaban de posición, pues ningún verano me pudo coger descanso, y este verano pasado pues tampoco. Pero la verdad es que estando las cosas como están uno va más tranquilo. No tienes el agobio de cuando ves que tienes un trabajo y no obtienes los frutos. Eso es mucho más jodido que cuando ves que ya empiezas a tener los frutos del trabajo, pero lo que está claro es que uno necesita vacaciones de vez en cuando.

-Pero las Navidades de este año van a ser mucho más satisfactorias, imagino

-Sin lugar a dudas. El año pasado teníamos muy poco margen de error en el mercado de invierno ya afortunadamente acertamos en todo, desde el entrenador que vino hasta el último de los jugadores que fichamos. Todos aportaron su grano de arena a la salvación del equipo, al margen de los que ya estaban.

La permanencia

-De este 2008 que ya está acabando, ¿qué imagen se le ha quedado a Miguel Ángel Rondán, deportivamente hablando?

-Muchas cosas, pero sin lugar a dudas me quedo con el día que conseguimos la permanencia ante el Elche, en un año que lo teníamos muy difícil y que estábamos en una situación complicada. Pero la capacidad de reacción que tuvo el equipo es lo más destacado y con lo que me quedo. Lo de ahora, estar arriba, de todo eso lo importante es que hemos conseguido una serie de puntos para estar lo más lejos posible de los puestos peligrosos y ya está.

-¿Y lo más negativo de este 2008?

-Ahora mismo no caigo en qué imagen ha sido la peor de todo el año. Por ejemplo me quedaría con empezar la pretemporada con muy pocos efectivos y ver al equipo entrenar con poca gente y con tantos problemas. Tal vez esa haya sido la peor imagen que se me queda grabada, los nervios de no saber si el club iba a salir para adelante y ver que el equipo estaba entrenando de esas manera.

-En ese verano Esteban incluso en tirar la toalla, ¿le pasó la misma idea por la cabeza?

-Yo tenía en la cabeza que tanta mala suerte no íbamos a tener y tenía que resarcirme de mis inicios. Cuando llegas lo haces verde y afrontas un trabajo del que no tienes mucha experiencia, por lo que yo quería continuar y en ningún momento se me pasó por la cabeza abandonar porque entendía que tenía que intentar conseguir lo que no pude el primer año, principalmente por falta de experiencia. Se tenía que ver el trabajo y había que intentarlo por todos los medios.

-¿Echa de menos alguna palmaditas, ahora que el equipo está tan bien, de aquellos que tanto le criticaron cuando entrenaba al Xerez?

-No. Yo sé cómo es el fútbol y lo dije el primer día que cogí el banquillo. Yo sabía que a partir de aquel momento me iba a crear muchas personas en contra, pero sé cómo funciona esto y no necesita nada de eso. Soy consciente de que cuando el equipo no funciona la gente estará enfadada, pero somos responsables y entiendo que estarán contentos cuando las cosas funcionan. Esto es fútbol y no le reprocho nada a nadie ni echo en falta nada. Yo sigo siendo el mismo y sabiendo que tengo la cabeza tranquila y que todo lo que he hecho por el Xerez ha sido por su bien, estoy tranquilo. Pero allá cada uno. Sé que nos movemos por los resultados y entiendo que cuando la cosa no funciona la gente no esté bien.

-Hablábamos del verano pasado, con todos los inconvenientes que había, y a eso habría que sumarle que el posible comprador del club no quería contar con usted, e incluso ya daban nombres para sustituirle

-Ya lo dije en aquel momento. Decidí no salir a la palestra para no estar todo el día hablando. Cuando una persona se quiere hacer cago de un club es lógico que quiera contar con unos y no con otros, son los que mandan y punto, pero mientras no fuera así tenía que seguir trabajando honradamente, porque yo seguía trabajando para el Xerez. Él tenía su idea de mis frutos, pero lo que nadie puede decir es que Miguel Ángel en algún momento no ha sido honrado con el Xerez. Nadie puede decir que me he lucrado con el Xerez.

Retocar poco

-El año pasado por estas fechas el equipo estaba en descenso. ¿Qué es más duro, buscar jugadores para evitar bajar a Segunda B, o hacer un esfuerzo por encontrar algo que mejore lo que hay y poder soñar con el ascenso?

-Es mucho más difícil lo del año pasado, sin duda. Además de que este año creemos que los refuerzos deben ser mínimos, si es que los hay o tenemos la posibilidad de hacerlo, hay gente que quiere venir ya que ahora estamos en una situación privilegiada en la tabla, todo el mundo habla del equipo a nivel nacional, somos aspirantes a todo y eso facilita las cosas que este pasado verano eran tan complicadas. Es mucho más difícil lo del invierno pasado, de traerse a un entrenador, un preparador físico y tres jugadores, y sobre todo que llegaran con la ilusión que vinieron y con las ganas de mejorar lo que había. Ahora hay que retocar menos y lo poco que tuviéramos que tocar sería más fácil ya que a muchos jugadores les gustaría jugar ahora mismo en el Xerez.

bfernandez@lavozdigital.es