El primer ministro belga Yves Leterme sale del Palacio de Belvédère después de presentar al Rey Alberto II la dimisión del Gobierno en pleno. /Efe
crisis política

El Rey de Bélgica abre consultas sobre la dimisión del Gobierno en bloque por el escándalo del 'caso Fortis'

El monarca, que se reserva su respuesta, ha comenzado a recibir en el Palacio Real a los presidentes de los partidos que hasta ahora formaban el Ejecutivo

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Rey de Bélgica, Alberto II, ha preferido reservarse su respuesta sobre la dimisión en pleno del Gobierno de Yves Leterme, y ha abierto consultas, según un comunicado de palacio.

Después de reunirse con Leterme, el monarca ha comenzado a recibir en el Palacio Real a los presidentes de los partidos que hasta ahora formaban el Gobierno, compuesto por los democristianos y liberales flamencos y francófonos y los socialistas francófonos, según informa la edición digital del diario Le Soir. El primero en acudir a la residencia real ha sido el dirigente del MR (partido liberal francófono), Didier Reynders, hasta ahora ministro de Finanzas.

El Gabinete de Yves Leterme, que tardó nueve meses en conformarse, se ha visto salpicado por el escándalo del 'caso Fortis', después de que se publicara un informe del Tribunal de Casación (la más alta instancia judicial del país) que ve "indicios serios" de que el Ejecutivo haya intervenido para frenar una sentencia judicial del 'caso Fortis' que le era desfavorable.

Pese a estas conclusiones, Leterme ha insistido mediante un comunicado que el Gobierno "en ningún momento" ha tratado de influir u obstaculizar el procedimiento judicial, pero ha reconocido que el informe "ha hecho imposible la continuación de la actividad de Gobierno".

Horas antes de la reunión extraordinaria que ha llevado al equipo de Gobierno a anunciar su renuncia, el ministro de Justicia belga, Jo Vandeurzen, presentaba su dimisión al conocer las conclusiones del Tribunal de Casación.

'Caso Fortis'

Como respuesta a una demanda presentada por un grupo de accionistas, el Tribunal de Apelación de Bruselas ordenó la semana pasada la suspensión de todas las decisiones que, en octubre, condujeron a la división y la venta de Fortis, el primer grupo bancario y de seguros del país.

En poco más de dos semanas, entre finales de septiembre y principios de octubre, la entidad fue parcialmente nacionalizada y el grueso de sus activos vendidos al Estado holandés (la parte holandesa) y al banco francés BNP Paribas (casi todo el negocio bancario en Bélgica y Luxemburgo y los seguros de Bélgica).

Los accionistas acudieron a los tribunales, descontentos por no haber sido consultados sobre esas medidas y según el informe que hoy ha presentado el Tribunal de Casación, hubo presiones desde el gabinete del primer ministro a los jueces encargados del caso.

El Rey ya se negó en julio pasado a aceptar la dimisión de Leterme, que la presentó ante las dificultades para sacar adelante la reforma institucional prometida por los partidos flamencos.