La pegada del Atlético de Madrid se impone al fútbol desplegado por el Racing
Demasiado premio para un rácano Atlético y excesivo castigo para un osado Racing. Pero el fútbol son goles y Simao, Kun, quien recuperó el olfato después de cuatro jornadas, y sobre todo Forlán tienen dinamita mientras que los montañeses emplean balas de fogueo. Eso, y la tremenda entrada de César Navas a Assunçao que le costó la expulsión con una hora por delante, marcaron un duelo polémico que sirvió a los de Aguirre, discutido por la grada durante buena parte de la segunda mitad, para acercarse un poco a la zona Champions.
Actualizado: GuardarEl Racing jugó como un valiente. Sabe que el Atlético es bueno arriba y sufre atrás, y se fue a presionarle con descaro la salida del balón. Enseguida llegó un error de la zaga, una pierna suelta dejada sin disimulo por Heitinga y el derribo a Tchité. Penalti claro que, si Medina hubiese sido más riguroso, podría haber supuesto la expulsión del holandés por ocasión manifiesta. El propio delantero de Burundi con pasaporte belga, una amenaza constante para los locales, lo transformó con la ayuda de Leo Franco.
Más tarde, el juego se equilibró y el central César Navas cometió dos errores de bulto en uno. Cuando trataban de ordenarse, Forlán encontró al Kun y éste la clavó de tiro raso.
El Atlético jugó con fuego en la reanudación. Pero al final consiguiño los tres puntos a base de goles.