Asesinatos en páginas interiores
Actualizado: GuardarDesde los foros feministas, las administraciones públicas y el personal especializado en violencia machista se insiste en que el papel de los medios de comunicación es muy importante para hacer visible la situación que viven las mujeres maltratadas. Y tienen razón. Los periodistas sabemos que la palabra es importante, que es implacable y que lo que no se publica no existe. También sabemos que las cifras son fundamentales para aportar y ocultar información. Y de estas premisas surge una doble observación. En primer lugar, los actos del Día contra la Violencia Machista se leyeron en la prensa provincial en páginas interiores o en crónicas de corresponsales que en sus pueblos recogieron las iniciativas de asociaciones vecinales. Poco más. Esto es síntoma de que nos vamos acostumbrando, narcotizando con tanta violencia -que es justo lo que se teme-, y de ahí que estos asesinatos pasen a la rutina de una media columna. En segundo lugar, anoten el baile de cifras. Según las fuentes oficiales, las mujeres asesinadas durante este año oscilan entre las 57 y las 60. Ojo al verbo. Como si las menospreciadas, insultadas, golpeadas, machacadas y apuñaladas fuesen un parámetro orientativo. Este intervalo varía en función de si la justicia decide que la mujer ha fallecido por causa directa de la agresión o si ha sido una complicación médica posterior. En ese caso, la asesinada cae en otra estadística mortal. Mientras, para la Red Estatal de Organizaciones Feministas contra la Violencia de Género, los casos ascienden ya a 80 en 2008. Y es que la organización incluye agresiones sexuales y descendencia de las víctimas. Ni las fuentes se ponen de acuerdo en cuántas han sido asesinadas. Mejor para nuestras conciencias, mientras más desconcierto, menor responsabilidad para cada uno y cada una de las que formamos este entramado machista. En fin, de todo lo que se ha dicho durante estos días acerca de los malos tratos me quedo con una advertencia que hizo la consejera de Igualdad y Bienestar Social de la Junta, Micaela Navarro, «que ninguna mujer ponga una denuncia sin asegurarse primero de que tiene protección». Ojalá que todas pidan ayuda... y que la encuentren.