Chema: «Nunca tuve dudas de mi trabajo en el Xerez»
El meta realizó un gran partido en Anoeta y apuesta por hacer oidos sordos a las críticas
Actualizado: GuardarDio el salto a la Segunda División algo tarde. De hecho, muchos técnicos de la división de bronce del fútbol español señalaban que se le había quedado pequeña la Segunda B, y fue ahí cuando apareció Lucas Alcaraz. El técnico azulino firmaba su finiquito en el vestuario de Chapín cuando aún los jugadores estaban sudando de su encuentro ante el Málaga B, mientras que Chema ya buscaba casa en Jerez, escuchando la oferta realizada meses atrás por el ya ex entrenador del Xerez.
De eso ya ha llovido. El meta alicantino ha dejado de ser un segundón y quiere formar parte importante de este nuevo proyecto deportivo de Esteban Vigo. A sus 28 años, suele ser centro de críticas, como todo portero, siendo la víctima de todo aquel entrenador que cada español llevamos dentro. Pero el ex del Alicante ya se conoce la historia. Tras lo tres tantos encajados en Vallecas, el cancerbero azulino se ha esforzado en demostrar que todo lo vertido contra él está lejos de la realidad. El sábado, por segunda vez consecutiva, acabó con su casillero a cero, todo un logro teniendo en cuenta el arsenal ofensivo de la Real y la espléndida actuación de Chema ante la parroquia realista.
Todo un empujón a su moral que el meta no quiere ocultar: «En la primera parte tuve alguna que otra intervención, pero sobre todo en la segunda mitad, cuando ellos más apretaban». De su actuación, Chema no quiere catalogarla como la mejor como azulino, sino que espera «que sea la primera de muchas más que quedan por llegar». Y es que el portero del Xerez está con ganas. Confiado de sus posibilidades, Esteban también tiene buena parte de sus confianzas depositadas en él: «Yo siempre he tenido mucha confianza en él, de hecho, viene jugando desde el principio de temporada.
Ha hecho partidos buenos y ahora lo ha visto todo el mundo, estoy muy contento por él, porque ha tenido algunas críticas inmerecidas y esto le permite fortalecerse. La confianza que tiene es buena para el equipo».
Unas críticas a las que el cancerbero quiere hacer oídos sordos y centrarse en el Xerez y su trabajo: «No tengo ninguna duda de mi trabajo. Lo que quieran decir los demás ya no es mi problema».