Una mujer falleció por un incendio en su vivienda en la madrugada del sábado

Una mujer de 52 años falleció en la madrugada del sábado, víctima de un incendio que se propagó en una de las viviendas de la casa de vecinos situada en la calle Zaragoza, número 16.

Se desconoce el origen del fuego, que afectó principalmente al salón de la casa, de unos 17 metros cuadrados, donde se encontraba el cuerpo de la fallecida. El Consorcio de Bomberos y los agentes de la Policía Nacional y Local, se dirigieron rápidamente al lugar de los hechos, ante las llamadas de numerosos vecinos, que notaron un fuerte olor a quemado en la zona. Sin embargo fue una de ellas la que localizó el origen del incendio, cuando ya comprobó que salía humo por la puerta y que las llamas comenzaban a asomar por la ventana de la vivienda. Los bomberos llegaron al lugar de los hechos a las 1.45 horas y procedieron a forzar la puerta de la casa, de pequeñas dimensiones, que estaba totalmente inundada de un denso humo, que prácticamente impedía la visión ya que estaba pegado al suelo, y soportando una temperatura muy elevada.

Finalmente consiguieron acceder al salón donde comprobaron que además de la fallecida, a la que trasladaron al exterior los servicios sanitarios, buena parte del mobiliario estaba totalmente quemado, incluyendo cortinas, mesa y una persiana. Precisamente todo apuntan que el oxígeno que entró desde el exterior a través de la ventana, cuando la persiana se quemó, hizo que se avivara el incendio, que comenzó a hacer acto de presencia fuera de la casa.

Tres vehículos del parque y ocho bomberos, que se trasladaron al número 16 de la calle Zaragoza, teniendo que utilizar 1.000 litros de agua para extinguir el fuego y finalizaron su intervención a las 5.30 horas, cuando regresaron al parque de vehículos, una vez que se personó en el lugar la autoridad competente para realizar el levantamiento del cadáver.

Antes de marcharse los bomberos inspeccionaron todos las habitaciones de la casa, que estaban dañadas, y evacuaron el humo, comprobando que las altas temperaturas que alcanzó el fuego hicieron que se desprendieran los techos de escayola.

Cerro Fruto

Por otro lado, en la matinal de ayer se produjo otro incendio en la ciudad, ubicado esta vez en la segundo planta de un bloque de viviendas situado en el número 15 de la calle Cerro Fruto, que no provocó daños personales, pese a que en el interior del piso se encontraban tres personas, un matrimonio mayor y su nieto, al propagarse el fuego.

Los bomberos llegaron al lugar de los hechos a las 8.30 horas de la mañana, y encontraron mucho humo en el salón de la vivienda, de unos 17 metros cuadrados, donde localizaron el incendio. Sus tres ocupantes y los vecinos, pertenecientes a unas cinco familias, ya se encontraban en el exterior, por lo que la puerta estaba abierta y las llamas, muy activas, comenzaban a asomarse por las zonas comunes del edificio. Según testigos presenciales, el humo descendía por las escaleras, pero al tener ventanales abiertos no se produjo demasiada concentración.

El cuerpo de bomberos desplazado a Cerro Fruto, formado por ocho efectivos, necesitó 3.000 litros de agua para conseguir extinguir el incendio en poco menos de media hora.