PINCHITOS MORUNOS

Se alicata La Caleta...todo barato

Una de las mejores cosas que dejó Carlos Díaz y su equipo de gobierno al frente del Ayuntamiento de Cádiz fue la limpieza a fondo del borde marítimo de la ciudad. A la playa de la Victoria se le dio un limpiao que no la conocía ni Sinueh el egipcio Desaparecieron las casetas, que eran como los aparcamientos que hace ahora el PP por todos lados, pero con olor más a berza que a aftersun. Se construyó un Paseo Marítimo que sigue siendo el mayor sitio de concentración de gente en Verano y se recuperó todo el borde del Casco Antiguo, con un enlosado masivo que gastamos entera toda cantera de Arcos.

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Se arregló, aquí con la dirección de mi vecino de columna, Hola Carlo, el Campo del Sur con los famosos tonos pastel de José Manuel Vera Borja. Se puso de durse La Alameda y hasta volvió a mear el niño de la fuente. Se reconstruyó la muralla de San Carlos y se proyectaron aún más cosas que no han llegado a hacerse. Estas cosas hay que contarlas porque como los gaviotos se empeñan en borrarlo todo como si aquí después de Viriato no hubiera existido nadie, pues conviene refrescar la cabecita.

Cuento esto porque quizás una de las cosas que más aprecien de la ciudad los que vienen de fuera es este borde marítimo limpio. Tan sólo queda chungaleta el colegio que hay frente a La Caleta, que creo que se proyectó tirarlo, pero que no creo que ahora, con los gaviotos en San Juan de Dios, caiga...como no sea que algún empresario quiera poner debajo un aparcamiento subterráneo...que seguro que entonces todo serán facilidades, vamos que hasta Romaní coge la espiocha. Es una lástima que un objetivo logrado se tire ahora por tierra con la construcción de chiringuitos a lo pijo al mismo borde del mar. Es incomprensible que se sitúe un mamotreto delante de la playa de La Caleta impidiendo la visión del mar cuando a pocos metros está el Castillo de Santa Catalina donde quedaría de lujo un restaurante que, además, daría servicio a esta instalación y a la playa.

Hace unos veinte años se intentó construir, bueno se llegó incluso a empezar, un muelle para Naútica frente a La Caleta que se tiró por la presión ciudadana que entendía que se perdía un paisaje singular. Ahora son muy pocas las voces que se han levantado...aquí todo el mundo está ahora acostado, más que levantado. Da la impresión de que el Ayuntamiento tiene interés por tapar el borde marítimo, ya sea con vallas de propaganda o con chiringuitos a lo pijo y si les valiera hasta alicataban la playa de La Caleta. Quizás todo sea una alegoría del equipo de gobierno (a tiempo parcial) de Teófila Martínez y es que quizás la mejor manera de que no se vea como está la cosita sea taparla. Voy a poner una empresa de tapajunta y fabricación de macilla que me voy a forrar.