ETA quiso secuestrar al concejal de Eibar como prueba de fuerza tras la tregua

ETA ordenó poco antes del verano de 2007 al 'comando Vizcaya' secuestrar y asesinar al concejal del PSE en la localidad guipuzcoana de Eibar Benjamín Atutxa Iza como demostración de fuerza después de poner fin a la tregua en junio. El activista 'liberado' que dirigía el complejo terrorista, Arkaitz Goikoetxea, ha confesado ante la Guardia Civil que el complejo ahora desarticulado siguió entre septiembre y diciembre los movimientos del edil, pero que, finalmente, desistió del secuestro ante las fuertes medidas de seguridad que tenía el político vasco, incluidos dos escoltas y contravigilancias.

La cúpula militar de ETA ordenó al comando, que se hacía llamar 'Askatu Haizea' ('Liberad al viento'), que el secuestro fuera un calco del de Miguel Ángel Blanco en julio de 1997, hasta el punto de que el edil socialista iba a ser capturado en la misma comarca en la que lo había sido el concejal del PP asesinado hace once años.

Credibilidad

El rapto no iba a involucrar a todo el 'comando Vizcaya', a pesar de que el complejo terrorista montado por Goikoetxea tenía una célula activa con tres terroristas y base en Elorrio, a 17 kilómetros de Eibar. Sólo dos activistas, además de Goikoetxea, estaban al tanto de la operación y participaron en los seguimientos: el 'liberado' huido, Jurdan Martitegi, quien probablemente abandonó el comando cuando se frustraron los planes del secuestro, y una mujer entonces 'legal' (no fichada), Olga Comes. También en el secuestro y asesinato de Blanco sólo participaron tres personas: Francisco Javier García Gaztelu, 'Txapote', Irantzu Gallastegui, 'Amaia', e Ibon Muñoa, precisamente ex concejal de HB en Eibar.

Los servicios de Información de la Guardia Civil conceden «toda la credibilidad» a la confesión de Goikoetxea, que ha ofrecido detalles muy particulares sobre las rutinas del concejal y que ha descrito sin problemas las medidas de seguridad que adoptaba.

La versión del 'liberado' estaría apoyada por el hecho de que la cúpula de la banda, además de ordenar el secuestro, facilitó a los terroristas del 'comando Vizcaya' los fármacos necesarios para mantener drogado a Atutxa durante su seguramente breve y cruel cautiverio.

En el primer zulo hallado el pasado miércoles en la localidad riojana de Valgañon se encontraron, entre otros muchos efectos, grilletes policiales, que podían haber servido para inmovilizar al concejal, pero sólo dos ampollas de tranquilizante 'Valium', insuficientes para sedar a la víctima durante tantas horas. Sin embargo, en el segundo escondite, encontrado el jueves en el municipio riojano de Pazuengos, los efectivos de la Unidad de Acción Rural (UAR) de la Guardia Civil hallaron una verdadera apoteca para drogar a la víctima; inyectables de medicamentos, todos comprados en Francia, con potentes efectos sedantes o relajantes como 'Tiapridal', 'Vogalene' o 'Spanfon', además de unidades de glucosa, también de origen galo, para, supuestamente, reanimar al secuestrado.

Los especialistas del instituto armado creen que el lugar elegido por los terroristas para retener durante un par de días a Benjamín Atutxa podría haber sido la casa que la familia de la novia de Goikoetxea, Maialen Zuazo, tiene en la urbanización 'El Cardizal' de la localidad riojana de Ezcaray y que el comando ya utilizaba como base operativa. La escasa duración prevista para el secuestro, que concluiría con el asesinato de la víctima tras un ultimátum al Gobierno de imposible cumplimiento, hace del piso un lugar sin problemas logísticos.

Otoño, cuando debía haberse llevado a cabo el secuestro, es el momento de mayor tranquilidad en Ezcaray, que tiene sus temporadas altas en verano y en la época de esquí. Además, refuerza la hipótesis de que la casa de 'El Cardizal' iba a ser la 'cárcel' de Atutxa el hecho de que los medicamentos y las esposas estuvieran escondidos en zulos situados a sólo 5 y 17 kilómetros, respectivamente, del núcleo urbano.

Origen del comando

La declaración de Goikoetxea, además de desvelar los planes para secuestrar al edil de Eibar, asesinar al juez Fernando Grande-Marlaska y perpetrar un gran atentado en Getxo, ha servido a la Guardia Civil para conocer los orígenes de este complejo terrorista. 'Askatu Haizea' nació en febrero de 2007, cuando el 'liberado' ahora detenido fue llamado por el jefe de los comandos de ETA, Garikoitz Aspiazu, 'Txeroki', que le presentó al que iba a ser su compañero de 'talde', el huido Jurdan Martitegi.

Ambos recibieron la orden de crear un nuevo 'comando Vizcaya' que sustituyera al anterior grupo, que había sido desarticulado sólo días antes (el 9 de enero de 2007) con la detención en la localidad vascofrancesa de Ascain, tras una rocambolesca huida, de Garikoitz Etxeberria Goikoetxea y Asier Larrinaga Rodríguez.

Los dos futuros 'liberados' fueron entrenados en Francia sobre el uso de armas y, sobre todo, para fabricar ellos mismos los explosivos. Tuvieron los mejores 'maestros': Aitzol Iriondo, 'Gurbitz', lugarteniente de 'Txeroki', y Luis Ignacio Iruretagoyena, que hasta su detención en septiembre de 2007 era el mayor experto en bombas de la banda. Antes de comenzar su carrera criminal con el atentado en agosto contra la casa cuartel de Durango, los dos terroristas ficharon entre sus cuadrillas de amigos de Durango y Algorta a los nueve 'legales' que han sido detenidos hasta la fecha.

Por otro lado, la Guardia Civil registró la madrugada de ayer la casa en la localidad vizcaína de Getxo del posible 'número dos' del comando, el huido 'legal' Asier Borrero Toribio, y de su novia, Inge Urrutia, detenida en Algorta el jueves a mediodía. Los agentes, que estuvieron en el interior del inmueble durante cinco horas, se incautaron de diverso material y tres cajas de documentación. Entre los papeles descubiertos, según fuentes de la investigación, hay «referencias sobre políticos vascos».