Multas
Dicen que los municipales se están jinchando este año de poner multas en la playa a los que juegan a la pelota en zonas prohibidas. No me parece mal, pero creo que hay otras cosas que se hacen en nuestras playas que son más dignas de una buena multa. De hecho, quisiera aprovechar estas líneas para hacer una propuesta: Que multen a los guarros que dejan basura en la arena.
Actualizado: GuardarY es que me da tanto coraje estar en la playa y ver a la gente que levanta el campo y se va sin recoger las botellas, las bolsas, y las latas de refresco, me danto coraje, digo, que me acercaría y gritaría en toda su cara: ¿Guarro, que eres un guarro! Y le diría lo mismo al que se fuma el cigarrito y deja la colillita entre la arena. O a la mari que tira el papel del polo mientras pasea por la orilla.
En serio, no hablo por hablar: yo ponía policías en la playa para multar a esa gente.
Y mira, ya de paso, pues también multaría a los padres o madres que están con sus santos y respectivos miembros sentados en las hamacas mientras que sus hijos se hartan de jugar hinchando globitos en la fuente, toda la tarde tirando agua, niño, vete p´allá, hijo, que ahí tienes un charco de agua la mar de grande, no juegues con esta que es cara y escasa, joé.
No sé, a lo mejor mi propuesta es impopular y yo soy una exagerada. Quizá vi demasiadas veces Verano Azúl en mi infancia, no matéis mi planeta por favor, pero de verdad, no seaís más guarros, joé, que estoy jartita, que a veces me posee el espíritu de mi admirado Quiñones y salgo de la playa cargada de porquerías que no son mías. Que el día menos pensado me va a poseer el espíritu de Zidane y me voy a liar a cabezazos y me voy a quedar sola.