El FMI y la banca señalan que la economía española irá mucho peor el próximo año
El instituto monetario sólo recorta de manera drástica las previsiones para España, mientras que en el resto de los países, incluido Estados Unidos, contempla una mejora
Actualizado: GuardarEl mundo financiero cree que, a pesar de los síntomas de crisis que ya padece la economía española, las cosas irán mucho peor el próximo año, debido a que al desplome del sector inmobiliario y las dificultades crecientes para obtener liquidez -no sólo a nivel nacional- se ha unido el fuerte encarecimiento de los productos energéticos, en especial los combustibles.
Por este motivo, el FMI no cree que el PIB de España pueda aumentar más de un 1,2% en 2009 -medio punto menos de lo que pensaba en abril-, en lo que supone casi el único recorte drástico de sus previsiones pues contempla una cierta mejora para el resto de países, incluido EE. UU. No obstante, prevé que aún puede crecer a una tasa del 1,8% en 2008, si bien aquí la propia Asociación Española de Banca se muestra más pesimista y sólo espera un alza del 1,5% en el presente ejercicio y poco más del 1% el que viene.
Aunque apenas entra en detalles, el FMI advierte que la situación que padece la economía española es, cuanto menos, «difícil», entre otras cosas porque el deterioro de la actividad durante el primer trimestre (en el que apenas se elevó tres décimas) ha sido más importante de lo que la mayoría de los analistas esperaban y, lo que es más grave, la coyuntura ha ido a peor durante la primavera y ha provocado que se comience el verano en unas condiciones delicadas.
Con estos parámetros, los técnicos del Fondo han optado por 'castigar' a España con un recorte severo en sus previsiones para 2009, de manera que dejaría de crecer por encima de la 'zona euro' para igualar su media (1,2%), con una tasa aún superior a la de Alemania (1%), Italia (0,5%) o EE. UU. (0,8%), pero por debajo de Francia (1,4%), el Reino Unido (1,7%), Canadá (1,9%) e incluso Japón (1,55).
En cualquier caso, el FMI si ve la luz al final del túnel, como demuestra el hecho de haber elevado las previsiones de algunos países, sobre todo Estados Unidos (un 0,8% más para este año y un 0,2% para el próximo) y Alemania (0,6%).
Y es que, a pesar de la encrucijada en la que cree se encuentra «atrapada» la economía mundial, entre la «abrupta desaceleración de la demanda» y la inflación creciente a nivel internacional, considera que en 2008 se expandiría un 4,1%, cuatro décimas más de lo que creían los técnicos a principios de primavera, y en 2009 un 3,9%, por lo que creen que «puede esperarse» una recuperación moderada de la actividad económica en su segunda mitad.
La banca, más pesimista
A nivel interno, las estimaciones que hace la patronal bancaria española son, incluso peores. Con un análisis que coincide en líneas generales con el del FMI, constata que la economía tiene ahora menos capacidad para generar empleo mientras el paro aumenta con «rapidez», hasta el punto de que cree que su tasa superará el 11% durante 2009, valoración en la que coinciden ya casi todos los expertos.
Afirma, no obstante, que el país tiene elementos suficientes para «atenuar esta fase de ajuste» -entre los que cita los resultados «sólidos» de las empresas, pero considera que ello no impedirá que las cuentas públicas vuelvan a entrar en números rojos -no descarta un déficit de hasta el 2% del PIB en 2009 o 2010-. Con todo, lo más preocupante para los bancos es la inflación, pues creen que entre julio y agosto, e incluso septiembre, podría dispararse hasta una tasa del 5,5% -si bien esperen que el ejercicio próximo se reduzca a niveles cercanos al 3%-.