![](/cadiz/prensa/noticias/200807/12/fotos/038D5CA-MUN-P1_1.jpg)
Irán teme un ataque israelí a sus instalaciones nucleares
Medios de Teherán y Bagdad afirman que los cazas hebreos entrenan en Irak Denuncian que aviones norteamericanos protegen las presuntas maniobras
Actualizado: Guardar¿Está utilizando Israel el espacio aéreo de Irak y las bases norteamericanas situadas allí para ensayar un ataque fulminante contra las instalaciones nucleares de Irán? El Gobierno hebreo se apresuraba ayer a desmentir esta posibilidad, después de que la cadena de noticias iraquí Nahrainnet lanzara el testimonio de oficiales de la provincia de Al-Anbar, en el oeste del país, que aseguran que reactores hebreos entrenan desde hace más de un mes sobre sus cabezas una supuesta ofensiva dirigida a Irán. Y que emplean para ello las plataformas militares norteamericanas, que habrían reforzado inusualmente sus medidas de seguridad desde hace tres semanas.
Según estos testimonios -entregados desde el anonimato-, aviones de carga y de reconocimiento tipo 'dron' del Ejército estadounidense han incrementado sensiblemente sus vuelos para proteger las presuntas maniobras nocturnas de Israel, que habría hecho llegar sus cazas hasta territorio iraquí a través de Jordania.
De confirmarse el operativo, ésta sería la segunda gran colaboración militar para actuar contra Irán ensayada en menos de dos meses entre el Estado judío y la Administración de George W. Bush, que entre el 28 de mayo y el 12 de junio supervisó los ejercicios realizados en el Mediterráneo por más de un centenar de F-15, F-16 y helicópteros de combate hebreos en lo que se interpretó como unas maniobras preparatorias para bombardear los desarrollos atómicos de Mahmud Ahmadineyad.
Detalles de la operación
Los detalles del ensayo en Irak, -que supondría otra vuelta de tuerca en la escalada de disuasión emprendida entre Teherán y Tel Aviv-, han proliferado después en las informaciones de la iraní Press TV, dirigida por el régimen, que precisaba que la flota de combate hebrea aterriza en la base norteamericana de Nasiriyah, muy próxima a la frontera con Irán, y la de Al-Assad, en Haditha, provincia de Al-Anbar, desde donde el viaje de un reactor para alcanzar la central nuclear de Bushehr llevaría el tiempo récord de tan sólo cinco minutos.
De la constante preocupación de la República Islámica en torno a la posibilidad de maniobras de este tipo dan cuenta las declaraciones confiadas aparecidas hace quince días en el diario 'Kayhan' -patrimonio del Líder Supremo, Alí Jamenéi-, en las que se afirmaba que Estados Unidos nunca permitiría a Israel utilizar el espacio aéreo iraquí porque los precios del barril subirían hasta los 250 dólares -157 euros-.
Los datos sobre este aparente entrenamiento de ataque se conocían coincidiendo con las pruebas de misiles practicadas entre el miércoles y el jueves por la Guardia Revolucionaria Iraní, que conseguían lanzar «con éxito» un modelo Shihab-3 con capacidad para alcanzar a Israel, además de otros proyectiles teledirigidos con presuntos fallos, luego maquillados adulterando las imágenes.
No obstante, el Gobierno judío, a través de su portavoz, Mark Regev, reaccionaba ayer tachando de «erróneos» los informes que hablan de maniobras hebreas en Irak, al tiempo que añadía que Israel no tiene ningunas intenciones hostiles contra el régimen de los ayatolás.
Contradiciendo sus palabras, el ministro de Defensa, Ehud Barak, advertía el jueves de que Israel golpearía «cuando haga falta» a Irán, desde donde el ayatolá Mohamed Emami Kashani -portavoz de las posturas oficiales de la República Islámica- respondía ayer al asegurar que el Estado judío encontrará «una respuesta de la que os vais a arrepentir».
Israel no baja la guardia. Esta semana presentaba su nuevo avión de alerta capaz de espiar a Irán, apremia a Estados Unidos para recibir cuanto antes los nuevos cazabombarderos F-35 y desarrollar a toda prisa su sistema antimisiles Arrow-3.