ESPAÑA

El fiscal pide 18 años para la etarra Lola por el secuestro de Cosme Delclaux

La Sección Segunda de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional juzga el próximo viernes a la etarra Dolores López Resina, alias 'Lola', por su presunta participación junto a otros miembros de ETA ya condenados o en situación de rebeldía en el secuestro y posterior encierro de 232 días del abogado vasco Cosme Delclaux en 1997.

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El Ministerio Fiscal la considera autora de un delito de secuestro terrorista por lo que solicita para ella una condena de 18 años de cárcel así como una indemnización de 6.010.121 euros (cantidad de dinero que la familia pagó por el rescate) al hijo del secuestrado Álvaro Delclaux y otra indemnización de 120.000 euros al propio Cosme Delclaux en concepto de daños morales.

Según el escrito de acusación provisional de fiscal Juan Moral, Dolores López, siguiendo las directrices marcadas por la banda terrorista ETA, colaboró en la adquisición y preparación de un local situado en la calle Gaviria del barrio de Ventas de Irún (Guipúzcoa) con el objetivo de habilitar allí un zulo en el que posteriormente introdujeron a su víctima.

El 11 de noviembre de 1996, la acusada, junto a los ya condenados Gregorio Vicario Setién y Josu Ordóñez Fernández, secuestraron al abogado cuando salía de su lugar de trabajo y después de varios meses de seguimiento.

Largo secuestro

Así, Delclaux permaneció recluido en un zulo de 90 centímetros de ancho, tres metros de largo y 1'94 de alto durante 232 días. En aquel habitáculo contaba tan solo con un colchón, una mesa pequeña y un water higiénico. Los terroristas le proporcionaban tres comidas diarias y ventilaban el lugar una vez al día con un ventilador eléctrico. Además mantenían conectada durante todo el día una radio mal sintonizada.

Aquel zulo, no tenía ventilación ni comunicación alguna con el exterior. A él se accedía desde unas dependencias que simulaban ser un almacén, mediante un dispositivo de apertura mecánica oculta entre unas estanterías metálicas que estaban ubicadas en un lugar de difícil localización, explica el informe fiscal.

Cosme Delclaux logró abandonar su situación de cautiverio el 1 de julio de 1997 después de que su familia entregase a varios miembros de la banda no identificados mil millones de pesetas en dos pagos de 500 millones.