Israel y Hezbolá intercambian gestos como síntoma de avance en sus negociaciones indirectas

El espía libanés Nissim Nasser, preso en Israel desde hace seis años por espionaje y colaboración con Hezbolá, ha sido puesto en libertad a primera hora de esta mañana y escoltado a la frontera con el Líbano para su entrega a personal del Comité Internacional de la Cruz Roja. Este gesto ha coincidido con la entrega, por parte del grupo chií libanés Hezbolá, de los restos mortales de varios soldados israelíes caídos durante la guerra de 2006 entre Israel y el Líbano.

La liberación del espía libanés se había interpretado como un gesto de buena voluntad de Israel después de que recientemente se anunciasen importantes progresos en las negociaciones que mantiene el país con la milicia chiíta libanesa de Hezbolá, con la mediación de Naciones Unidas, para un intercambio de prisioneros. De igual manera se ha interpretado la decisión posterior de la milicia.

"El momento no es una coincidencia. Israel podría haberle transferido a Líbano hace semanas, pero el procedimiento se ha retrasado para que sea percibido como un gesto de Israel", ha reconocido a los medios la abogada del espía libanés, Smadar Ben Natan.

Nasser, un judío libanés convertido al islam, fue sentenciado a seis años de cárcel en el 2002, tras ser declarado culpable de espionaje. La pasada semana fuentes libanesas e israelíes informaron de que en las próximas semanas Israel podría dejar en libertad a Samir Kuntar, encarcelado en Israel por asesinato y espionaje, y a otros cuatro miembros de Hezbolá, además de devolver a la milicia los restos de diez de sus miembros fallecidos en combate.

Entrega de los restos de los soldados israelíes muertos

Sólo un par de horas de hacerse efectiva la liberación de Nasser, el grupo chií libanés ha entregado a la Cruz Roja Internacional los restos mortales de varios soldados israelíes caídos durante la guerra de 2006 entre Israel y el Líbano, según ha confirmado un portavoz de esa organización a la televisión libanesa Al Manar.

El portavoz de Hezbolá, Wafik Safa, ha confirmado que la liberación de Nasser entra en el marco de un canje de prisioneros con Israel, que incluye la devolución de los restos mortales de soldados israelíes. Sin embargo, Safa no ha aclarado si los restos pertenecen a los soldados Ehud Golwasser y Eldad Regev, cuya captura por la milicia en julio de 2006 desató la guerra.

Ya en territorio libanés, Nasser ha dirigido unas palabras a los seguidores de Hezbolá. En primer lugar ha manifestado su agradecimiento al jefe de este grupo, el jeque Hasan Nasralá. "Enhorabuena a todo el Líbano y a Hasan Nasrala. Si Dios quiere, en breve veremos el regreso de todos los presos en las cárceles israelíes a territorio libanés", ha apuntado.