Rubalcaba ve intereses electorales tras los movimientos de Ibarretxe
El ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, reconoció ayer que advierte «un aroma electoral» en los últimos movimientos del lehendakari, Juan José Ibarretxe, e insistió en que «no habrá» referéndum de autodeterminación en el País Vasco porque «se aplicará la ley y se aplicarán las normas».
Actualizado: Guardar Rubalcaba señaló ayer en Telecinco que, a su juicio, detrás del plan del lehendakari «están las elecciones a la vuelta de la esquina» y quiere que parezca que el Gobierno «no hace caso» a sus peticiones. «Naturalmente que dialogamos, lo que pasa es que hay cosas que podemos hablar pero no podemos hacer porque está la Constitución, que no vamos a modificar para eso», enfatizó.
En este sentido, recordó que existe «muy buena relación» con el País Vasco y «va a seguir» en temas importantes como infraestructuras o investigación, pero insistió en que el plan «de autodeterminación» propuesto por Ibarretxe «no cabe en la Constitución».
«¿No sería bueno que si queréis revisar el estatus político, en el marco de las normas legales que es la Constitución, lo hicierais en Euskadi? -preguntó-. Se ponen de acuerdo, vienen aquí, lo acordamos en el Parlamento y se vota en el País Vasco, eso es lo que dice la Constitución».
«Un atajo»
A su juicio, parece que el lehendakari «ha querido coger un atajo» e ir a La Moncloa «sin ponerse de acuerdo en su casa», que, en su opinión, «es donde se debe empezar por discutirlo». «Y, sobre todo, un atajo que no le lleva a ninguna parte porque las leyes están para cumplirlas y la Constitución por encima de todo», insistió.
Respecto al terrorismo, auguró que ETA intentará atentar «durante un tiempo largo» pero avanzó que asistiremos «a un proceso de descomposición» en el que «seguramente se sufrirá» pero que desembocará en «la desaparición» de la organización terrorista.
Rubalcaba explicó que la banda «no tiene horizonte estratégico» tras la ruptura de la tregua, cuando «quedó claro» que «cuando dice que la violencia es una forma de ganar posiciones para dialogar es mentira», ya que, a juicio del ministro, «lo que ha querido es imponer sus principios y sus objetivos».
«Y como sabe que la democracia no lo va a hacer nunca, vamos a vivir un proceso de descomposición de ETA que no sabemos en qué se va a traducir, que nos va a crear dificultades y que va a tener un problema para la democracia, pero del que saldremos victoriosos».