Un año sin Madeleine

Kate y Gerry McCann vuelven a ocupar las portadas de la prensa británica. Hoy se cumple un año de la desaparición de Madeleine y el matrimonio ha impulsado una ofensiva mediática para reactivar la búsqueda de la pequeña. Reconocen que ésta «es su última oportunidad» de captar la intención internacional y «encontrar a Madeleine». Los McCann saben que el interés por el caso ha disminuido ante la falta de avances significativos en la investigación. No obstante, se han negado a viajar a Portugal para colaborar con la Policía lusa y conmemorar desde el lugar de los acontecimientos los doce meses de la desaparición de la niña.

Entre las iniciativas de la campaña impulsada por los McCann se encuentra el lanzamiento de una nueva línea de contacto telefónico, la emisión de un documental televisivo en la cadena británica ITV y la concesión de nueve entrevistas a la prensa. Pero el matrimonio no viajará al Algarve portugués, como se había especulado en un principio. Se había dicho que podrían participar en un vídeo que reconstruyese la noche del 3 de mayo de 2007, en la que desapareció Madeleine. Esta opción ha sido descartada.

Según Clarence Mitchell, portavoz de la pareja, los McCann se han negado a participar en dicho proyecto ante la negativa de las autoridades lusas de transmitir el documento fílmico por televisión. «Si no tiene repercusión mediática, no serviría para encontrar a la niña», señaló Mitchell. Otras fuentes tienen opiniones distintas al respecto. En Portugal aseguran que los McCann se han negado a viajar hasta el país luso por su condición de «arguidos», sospechosos de la desaparición de la pequeña. La policía portuguesa ha mostrado su preocupación ante la actitud del matrimonio. «Quedan muchas preguntas sin responder e incoherencias en las declaraciones de los amigos que cenaron con los McCann en la noche del suceso», han asegurado fuentes de la investigación.

«Sigue viva»

Según diferentes fuentes, los abogados de la pareja podrían haber negociado la condición de «arguidos» a cambio de la participación del matrimonio en la reconstrucción fílmica de los hechos. Pero esta colaboración no se producirá. La pareja sigue siendo considerada sospechosa y sigue manteniéndose lejos del lugar de los acontecimientos, mientras concede entrevistas en un terreno mucho más seguro, en su país, Inglaterra. En estas comparencias han mostrado «su total convencimiento» de que «Madeleine sigue viva». «Es una sensación, simplemente siento que ella se encuentra cerca de mí, que está ahí», declaró Kate McCann en el diario Daily Mirror, donde también añadió categóricamente que «si la Policía no la encuentra, nosotros lo haremos».

En declaraciones a la prensa británica, el matrimonio además se ha defendido ante las continuas acusaciones de negligencia. Los padres de la niña dejaron a Madeleine y a sus dos hermanos solos en el apartamento donde veraneaban mientras salían a cenar con unos amigos. Por esta decisión aún siguen siendo blanco de numerosas críticas, a las que han respondido que ya han expresado en muchas ocasiones su arrepentimiento por ello, «no necesitamos que nos los recuerden».

El matrimonio fue considerado por la Policía lusa «sospechoso formal» de la muerte accidental y desaparición de su hija el septiembre pasado, fecha en la que abandonaron por última vez Portugal. Desde entonces han sido muy pocos los detalles que se han esclarecido sobre el caso. En los últimos meses la pareja se ha dedicado afanosamente a limpiar su imagen, valiéndose de los jugosos fondos recogidos durante la campaña por la búsqueda de la niña.