Siete palestinos, cuatro de ellos niños, mueren al impactar un misil israelí en una vivienda de Gaza

Siete personas han muerto, incluidas una madre y sus cuatro niños, y más de una decena han resultado heridas esta mañana después de que carros de combate israelíes abriesen fuego contra una vivienda en la ciudad de Beit Hanun, en el norte de la Franja de Gaza.

Las víctimas mortales han sido identificadas por los médicos como Jadra Abu Matuq y sus hijos Ahmad, Hana -de tres años-, Salih -de cuatro- y Rudayna -de seis-, además de Ayub Atallah -de diecisiete-, que se dirigía al colegio, e Ibrahim al Hjuj, miembro de la facción armada de la Yihad Islámica, Brigadas de Al Quds.

El director de los Servicios de emergencia en Gaza, Muawiya Hassanain, ha confirmado que las muertes se produjeron después de que los soldados israelíes abriesen fuego contra la casa de la familia Matuq en Beit Hanun. Un proyectil alcanzó el techo del edificio, de una planta, en el momento en que la familia desayunaba, según varios vecinos de la zona.

Los otros dos muertos eran militantes de grupos armados, mientras que entre los heridos se cuentan diez civiles, tres en situación crítica.

Civiles como "escudos humanos"

La portavoz del Ejército israelí, comandante Avital Leibowitz, ha asegurado que se está "investigando lo ocurrido" y que se trata de "una prueba más de que los terroristas (milicianos) operan desde zonas donde hay civiles, a los que utilizan como escudos humanos".

Según residentes en la zona, tras una incursión iniciada por la mañana, tanques del Ejército israelí dispararon en varias ocasiones contra los barrios septentrionales de Beit Hanún, apoyados por vehículos blindados y helicópteros.

Otra portavoz militar israelí ha indicado que la operación, que continuaba esta tarde, tiene la misión de impedir el lanzamiento de cohetes y otros proyectiles desde zonas desde las que suelen ser disparados contra Israel. Además, ha aclarado que su Ejército investiga las circunstancias de la muerte de la madre y sus hijos en Beit Hanún, y que de momento se estudia si se debió al "disparo de tanques, a una ataque de la aviación o a la explosión de un artefacto".

Conversaciones de paz

El brazo armado de Hamás, las 'Brigadas de Azedín Al-Kasem', ha asegurado en un comunicado que sus milicianos se enfrentaron a las fuerzas israelíes en la zona, y han asumido junto a la Yihad Islámica, la autoría del lanzamiento de varios cohetes contra localidades israelíes próximas a la franja.

La Autoridad Nacional Palestina (ANP) ha manifestado por su parte que la ofensiva militar israelí en la franja de Gaza "podría dañar los esfuerzos para acordar un alto el fuego entre Israel y los palestinos". "Estas agresiones no sirven a los esfuerzos para lograr la calma, y obstruyen el proceso de paz", ha aseverado el presidente de la ANP, Mahmud Abbás.

El repunte de la violencia se produce en medio de las conversaciones que mantienen Israel y Hamás con la mediación del Gobierno egipcio para alcanzar un alto el fuego en Gaza a cambio del levantamiento del bloqueo israelí a este territorio. Representantes de varias milicias palestinas han viajado a El Cairo para analizar si se avienen a esta propuesta de tregua.

Barak responsabiliza a Hamás

Sin referirse en detalle al suceso ocurrido en Beit Hanún, el ministro israelí de Defensa, Ehud Barak, ha responsabilizado a Hamás, que controla la franja desde junio pasado, de "todo lo que sucede dentro de Gaza".

Al visitar hoy una instalación de la Industria Militar en el centro de Israel, Barak ha agregado que el movimiento islamista, "que opera desde zonas pobladas y guarda artefactos explosivos en áreas civiles, también es responsable de que se produzcan víctimas civiles en este tipo de operaciones".