
El San Fernando se repone de una semana convulsa al ganar al Xerez B
Los de Iriondo rubrican el título de campeón y los de Puche su descenso Puli abre la lata y sigue la estela de Carrasco en la lucha por el 'pichichi'
Actualizado: GuardarMás temprano que tarde se iba a producir. Era una muerte anunciada que no coge a nadie por sorpresa. El Xerez B volvió a perder ayer en la Juventud, en el último hilo de esperanza que le quedaba, ante el San Fernando que se impuso por dos goles a cero y que además se proclama campeón de la tercera división, cuando queda un mes de competición.
La primera mitad comenzó con dominio del San Fernando, pero poco a poco el Xerez B le fue comiendo terreno al conjunto isleño y comenzaron a llegar las ocasiones para el filial azulino. Mucho toque, durante los primeros cuarenta y cinco minutos del cuadro visitante, pero poca presencia ofensiva y escasas ocasiones de gol. El San Fernando movía la pelota en su propio campo, sacaba el cuero jugado y con lentitud, pero las imprecisiones y los fallos en los metros finales, de medio campo hacia arriba, propiciaron que el Xerez B tuviera algunas ocasiones de gol en el contragolpe. La primera del partido la tuvo Carlitos para los locales, pero su disparo de falta directa se fue arriba. Antes de la media hora avisaba el San Fernando, Sergio Berro recogió una bola cerca del área y su disparo también se fue alto. Cuatro minutos más tarde, de nuevo Berro golpeó una bola mansa a las manos de Toni.
Fue entonces cuando los hombres de Puche se vinieron arriba y buscaron aferrarse al último hilo que les quedaba para la permanencia. Samuel en el 37 lo intentó tras pase de Lara, pero la pelota se marchó fuera de los tres palos. Lara también lo intentó, pero las ganas, el coraje y el corazón podían más que el verdadero peligro que llevaban contra la meta de Raúl Iglesias.
Antes del descanso, el San Fernando quiso despertar y a un minuto del final Puli lo intentó desde larga distancia, pero sin suerte.
La reanudación del encuentro iba a comenzar con fuerza para el conjunto isleño, que fue el dueño y señor de los cuarenta y cinco minutos. Iba a matar el partido en dos contragolpes bien hilvanados y de bella jugada, para alegría de aficionados y de jugadores. Antes del primer gol de la tarde, a los siete minutos Iván Guerrero que lo intentó durante todo el partido dio un aviso, pero el balón se marchó fuera. Tres minutos más tarde, Puli no iba a perdonar y mandaba el balón al fondo de la red. Casares, que se acababa de incorporar al terreno de juego fue un verdadero revulsivo, colocó el balón en el corazón del área desde el costado izquierdo y Puli como le vino el cuero lo enchufó para hacer el primero. Tras el gol, juego a placer de los isleños y toque y más toque de balón en todas las parcelas del terreno de juego. El segundo tanto llegó en el 75, tras magnífica jugada entre Casares, Guerrero y por último Berro, que mandó el cuero al fondo de la red, para certificar el triunfo y el desastre por otro lado del Xerez B. Al final, lo que tiene el fútbol, alegría para unos y tristeza para otros.