Volando alto
Se publican simultáneamente dos libros sobre la legendaria banda The Byrds
Actualizado: GuardarDespegaron desde Los Ángeles en 1964, deslumbrados en sus comienzos por la pegada de The Beatles aunque prestos para forjarse su propio plan de vuelo como catalizadores de algunos de los cambios musicales más relevantes de la década. Aupados por su inicial y transformadora recreación del Mr. Tambourine Man de Bob Dylan, The Byrds (un juego de palabras realizado tomando como base la palabra bird = pájaro) enriquecieron el concurrido territorio pop desde unos parámetros que ligaban inteligencia, riesgo y sensibilidad y que desembocarían en la acuñación de un modelo folk-rock pronto decantado hacia terrenos psicodélicos. La guitarra Rickenbacker de doce cuerdas de Roger McGuinn simbolizaría desde entonces a una formación cambiante por la que desfilaron nombres como Gene Clark, David Crosby, Chris Hillman y Michael Clarke - su nómina estelar - para dar paso en 1968 a un Gram Parsons que les insuflaría el espíritu del country-rock durante su breve estancia. En 1973 el grupo se disolvió y las puntuales y posteriores reuniones de algunos de sus miembros no lograrían más que contemplar de lejos la inspiración de álbumes legendarios como Younger Than Yesterday (1967), The Notorious Byrd Brothers (1968) o Sweetheart of the Rodeo (1968).
Después de años de vacío documental sobre su obra en nuestro mercado bibliográfico, dos biografías sobre The Byrds firmadas por autores españoles llegan dispuestas a exigir su espacio en las bibliotecas de aficionados al clasicismo rock. Las 370 páginas de The Byrds. Más jóvenes que ayer (Lenoir Ediciones; 2008) desglosan con pelos y señales la crónica del grupo californiano deteniéndose en sus episodios esenciales y tomando las declaraciones de sus protagonistas como eje central de la obra. Así, el madrileño Fernando López Chaurri - autor también de la también biografía The Hollies. Con estilo propio, (Milenio; 2004) - ha consultado a nombres esenciales de esta historia, como los mismísimos McGuinn y Hillman, para detallar e indagar con tacto en las claves del grupo y su tiempo. Jim Dickson, manager y productor de The Byrds, no duda en rematar tan destacada y detallista faena prologando una obra de rotundo valor documental.
Por su parte, en The Byrds. Pájaros de doce cuerdas. Historia y saga (Editorial Milenio; 2008), el catalán Guillermo Soler traza una semblanza más concisa y panorámica aunque no por ello menos estimable. De hecho, el interés de estas 150 páginas se encuentra tanto en su capacidad de síntesis como en una ordenación que complementa el relato descriptivo mediante un regular balance discográfico a través de una Guía de Compra que enlaza a The Byrds con su producción discográfica tanto oficial como recopilatoria. El libro también se adentra, concisamente claro, en las aventuras individuales y grupales de sus componentes, en su red de conexiones y herencia para terminar de dar forma a una diáfana visión de conjunto, ideal para quienes anden a la búsqueda de una introducción en tan fascinante historia.