La incógnita del banquillo
Menos mal que me dedico sólo a contar lo que ocurre en los equipos de fútbol y en el césped de los estadios. De lo contrario, creo que si tuviera que formar parte de una entidad, lo pasaría bastante mal. Para empezar, si las cosas no marchan bien al que te tienes que cargar, más que por imperativo legal, diría que por imperativo económico, es al entrenador y no a los jugadores, cuando en realidad te gustaría mandar a más de uno a paseo.
Actualizado: Guardar Al no estar en situación de exigir, dado el delicado panorama deportivo y la urgencia temporal, te tienes que poner a llamar como un loco a todas las puertas disponibles y a aceptar las condiciones que más de uno te plantee. En esta ocasión el candidato final, después de una pequeña criba que ahora no viene al caso desvelar, ha sido Fernando Vázquez. El técnico gallego se ha convertido esta semana en el elegido a ocupar el banquillo cadista, ya que al encontrar a uno que está interesado en echarte una mano, desde un principio aceptas su imposición de tener un año más de contrato cuando en el fondo sólo lo quieres para las diez finales que te quedan. También le dices que sí a su alta petición salarial y, encima, le dejas un tiempo para que se lo piense. Está claro que las prisas no son buenas consejeras y todo para que, al final, se te queda cara de tonto cuando el míster rechaza la oferta. Por supuesto que te puedes consolar pensando que con este entrenador, tal vez, tampoco se hubiera arreglado nada.
Compuesto y sin dirección fija, al Cádiz se le presenta la papeleta de tener que afrontar un partido trascendental para el futuro y que tendrá la presión adicional del público de Carranza. Si el equipo gana, el asunto del fichaje ni te preocupará, pero si no lo hace se te puede volver en contra. Buena suerte.
