«En mi época, en el Xerez había quince jerezanos»

-Es coordinador de la Escuela Municipal de Jerez y del Veteranos del Xerez. ¿Cuáles son exactamente sus funciones?

-En la Escuela intento llevar todo el tema de monitores y la planificación de todo lo que conlleva dirigir a más de 400 niños. Con el Veteranos me encargo del tema de los entrenadores y de la relación con los padres.

-¿De qué salud goza la cantera de Jerez?

-La verdad es que en principio no está muy bien, la prueba está en el primer equipo, en el que juegan pocos jerezanos. Aquí parece que se echa mano a la cantera cuando no hay dinero. En mi época como jugador del Xerez llegamos a ser quince jerezanos en la plantilla y, además, conseguimos el ascenso a Segunda División. Comprendo que el fútbol ha cambiado mucho, que ahora son empresas y lo que prima es ganar dinero y los resultados, pero hay que saber cuidar a la cantera.

-¿Y cuál sería la solución para mejorar este problema?

-De momento, en la cantera tienen que estar los mejores técnicos. En el Veteranos, los quince entrenadores que tenemos son ex jugadores del Xerez.

-¿Y se nota que un entrenador haya sido futbolista? ¿Hay mucha diferencia con alguien que no haya sido profesional?

-No se si hay diferencias, pero nosotros tenemos algo ganado, que es el haber sido futbolistas, el haber empezado desde abajo del todo, como nuestros jugadores. Además, todos somos titulados y sabemos lo que es haber jugado, como mínimo, en Segunda B.

-No es su caso, puesto que llegó a la Primera División de la mano de Sporting.

-Sí, el Xerez me traspasó a Gijón y la verdad es que fue una experiencia muy bonita, porque además llegué a coincidir con algunos jugadores ilustres.

-Como ex futbolista azulino, ¿cree que el equipo se salva del descenso?

-Pienso que lo va a conseguir. El partido del pasado sábado fue un punto de inflexión y hay que tener en cuenta que el equipo va para arriba. Además, hay muchos equipos implicados en el descenso y muchos puntos en juego. Pero el partido ante el Granada 74 es fundamental.