El Celta entierra su última ocasión para lograr el ascenso a Primera

El Celta enterró sus ya de por sí escasísimas oportunidades tras empatar a cero en casa ante el Sporting de Gijón, curiosamente en un buen partido de los de Antonio López en el que fueron superiores, merecieron más, pero se quedaron sin el premio del gol, sin los tres puntos y aunque no matemáticamente, definitivamente sin el ascenso.

Sea como fuere el Celta dejó escapar el último tren que le quedaba, una última oportunidad que todavía permitiría seguir soñando en el milagro que se esfumó al término de los 90 minutos durante los que el Celta se estrelló una y otra vez contra la portería contraria y la cruda realidad que le queda por delante con un punto que no le vale para nada.

Dominó el Celta la primera parte del encuentro en la que contó con un buen puñado de ocasiones de gol frente a un Sporting de Gijón que apenas dio señales de vida y en el que sólo la gran actuación de su guardameta Roberto impidió que se fueran al descanso con el marcador en contra.

Los celestes firmaron una de sus mejores actuaciones en estos primeros cuarenta y cinco minutos, muy fuertes físicamente, y en los que sólo les faltó el premio del gol pese a la insistencia sobre todo de Perera y Diego Costa, los dos puntas celestes.

Sus mejores ocasiones un disparo de Costa en el 19 que Roberto despejó a corner en una mano salvadora y sólo un minuto después, en el 20, Perera en un mano a mano que tiró al bulto y que el meta rojiblanco atajó con el pie.

Algunas más dispusieron los de Antonio López quien finalmente se decidió por situar al central Agus como lateral derecho y Jorge Larena en el interior izquierdo para jugar con un 4-4-2 que funcionó muy bien con un Ariel Rosada muy trabajador en la recuperación de balones.