Prisión bajo fianza de 3.000 euros para el agresor del portero Armando
El botellazo provoca al ex cadista un edema en la parte posterior de la retina El jugador vasco se ve obligado a estar varios días en reposo absoluto
Actualizado: GuardarEl Juzgado de Guardia de Sevilla decretó ayer prisión bajo fianza para el agresor de Armando, el portero del Athletic que la noche del sábado recibió un botellazo en el ojo durante el partido disputado contra el Betis en el Ruiz de Lopera, suspendido en el minuto 69 con 1-2 en el marcador. El individuo que lanzó la botella de agua, Carmelo Peña Rodríguez, que no es socio del Betis, ha sido acusado de un delito de desórdenes públicos y otro de lesiones, pero eludirá la cárcel si abona los 3.000 euros impuestos como fianza por el juez.
El botellazo ha provocado a Armando, además de una herida incido contusa en el párpado y un hematoma en el canto interno del ojo derecho, un edema interno en la parte posteroinferior de la retina «que requiere varios días de reposo absoluto», según el parte médico emitido por los servicios médicos del Athletic tras las pruebas efectuadas ayer al guardameta vizcaíno en el Hospital de Cruces. Armando será examinado de nuevo hoy para evaluar la vía lacrimal, tras lo cual se hará público un nuevo comunicado sobre el estado del portero, que ayer regresó con el equipo a Bilbao tras pasar la noche en el hotel de concentración del Athletic en Sevilla.
El colegiado del partido que decidió la suspensión del encuentro, el aragonés Clos Gómez, reflejó en el acta que el recogepelotas que se encontraba más cercano a Armando cuando éste fue golpeado en la cara por una botella de medio litro «casi llena» de agua, «recogió inmediatamente dicha botella, ocultándola» de la vista del árbitro. Fue el coordinador de seguridad de la empresa privada contratada por el Betis quien hizo llegar la botella de plástico al árbitro y quien le aseguró que era de la marca que se expide en el estadio.
Clos Gómez también señaló en el acta que el coordinador de seguridad del estadio, inspector jefe del Cuerpo Nacional de Policía, entró en su vestuario tras decidir la suspensión definitiva del encuentro y le hizo las siguientes observaciones: «¿Por qué han suspendido el partido? ¿Quién eres tú para tomar esa decisión sin contar conmigo? Según la Ley del Deporte no puedes hacerlo». Tras esas declaraciones Clos Gómez invitó al coordinador a abandonar su vestuario. «Como resumen indicar que el encuentro fue suspendido en el minuto 69 con el resultado de Real Betis 1-Athletic Club 2, encontrándose el juego detenido a la espera de realizar un saque de meta favorable al Athletic Club (...)», según el acta arbitral publicado ayer en la web del club bilbaíno.
Incidente «muy grave»
El Comité de Competición de la Federación Española de Fútbol (FEF) deberá decidir ahora, aparte de calificar el incidente como «muy grave» y clausurar el estadio Ruiz de Lopera, si da el partido por concluido con derrota del Betis, o su reanudación en terreno neutral, como ocurrió hace dos años, cuando un juez de línea recibió un monezado en el Valencia-Deportivo de Copa, o el año pasado, como consecuencia del botellazo lanzado en el Ruiz de Lopera contra Juande Ramos durante el Betis-Sevilla, también del torneo copero, que continuó a puerta cerrada en el campo del Getafe.
El Betis no ha tardado en solicitar que se disputen los minutos de partido que faltan por jugarse. «Armando ha sido una víctima de todo esto, pero la gran víctima es el Real Betis Balompié. Hay que destacar la actuación del público y de los socios deteniendo a este individuo, que lo pusieron a disposición de las fuerzas públicas. Por ello, nuestro público no debe ser castigado por este hecho aislado y tenemos derecho a que se jueguen los minutos que restan», manifestó el responsable de los servicios jurídicos del club verdiblanco, Manuel Castaño. El Athletic, sin embargo, defiende que se decrete la pérdida del partido para el Betis, la otra posibilidad que recoge el artículo 86 de los Estatutos de la Federación por infracciones comunes «muy graves».