El joven acusado de matar a Manu insiste ante la jueza en que no recuerda lo ocurrido

El joven acusado de matar a Manuel Romero Peralta, y que actualmente permanece en prisión preventiva, acudió ayer por la mañana a los juzgados de Sanlúcar para declarar, por segunda vez, ante la jueza del nº 4 que instruye la causa. La familia de Manu confiaba que en este segundo interrogatorio a Manuel C. D., alias El Patas, modificara su declaración inicial, bien para reconocer los hechos o para colaborar en la identificación de posibles cómplices. Pero no se produjo el testimonio deseado.

El Patas insistió de nuevo en que no recordaba nada de lo ocurrido en la mañana del 5 de agosto, cuando la víctima fue apuñalada en el Pinar de la Villa, de Chipiona. Fundamentó esa falta de memoria en un fuerte consumo de drogas la noche previa y aseguró que había acudido sólo a la localidad chipionera, en un intento por desvincular a cualquier persona de su entorno.

El letrado de la familia del finado le recordó que había cinco amigos suyos que explicaron el día que murió Manu que habían viajado desde Dos Hermanas junto a El Patas en un mismo coche y que habían asistido a la misma fiesta. Además, está el testimonio de la joven que le acompañó en su huida tras perpetrar supuestamente el homicidio y que niega que estuviera solo.

Otro aspecto de la investigación que los familiares de Manu pretendían aclarar ayer con la segunda declaración de El Patas era la implicación de más personas que pudieron ayudarle en la agresión cometida contra la víctima. Hay varios testigos que indicaron en su día cómo vieron al fallecido rodeado por un grupo de personas antes de desplomarse en el suelo herido de muerte. El preso fue interrogado sobre el joven recientemente detenido en Sevilla y que está en libertad con cargos. El Patas sí afirmó que lo conocía, pero que no recuerda si estaba en el pinar la fatídica mañana.

A modo de conclusión, este joven delincuente dijo sentirse víctima de un complot de varias personas de Sanlúcar que quieren vengarse de él. Por ese motivo, el letrado de la familia de Manu le preguntó por las declaraciones incluidas en sumario de dos personas que recibieron una llamada de él cuando regresó a Dos Hermanas. Estos conocidos aseguran que El Patas les pidió llorando que no dijeran que había sido él, según explicaron fuentes del entorno del fallecido.

Antes de ser trasladado desde la prisión de Sevilla a los juzgados de Sanlúcar, Manuel C. D. pidió protección ante una posible concentración de amigos y familiares de la víctima. La Policía Nacional activó un dispositivo de vigilancia, con agentes de paisano y uniformados, para evitar que se produjeran de nuevo los altercados vividos al día siguiente del arresto del principal sospechoso. En esa jornada, centenares de personas se congregaron en las inmediaciones del edificio judicial y los antidisturbios tuvieron que intervenir para frenar el intento de linchamiento al detenido.

En esta segunda ocasión, la familia de Manu no había difundido que el acusado iba a declarar ayer. Eso hizo que apenas se reunieran una decena de personas, que fueron vigiladas permanentemente por los efectivos policiales, que no tuvieron que intervenir. Sólo fue multado un amigo de Manu, que había escondido un huevo y parte de un candado de moto. Los objetos fueron encontrados por un pareja de policías de paisano.

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