Paseo entre dos mares
Los deslindes en las vías pecuarias permiten, por primera vez, recorrer en bici, a pie o a caballo y sin obstáculos la ruta entre la Bahía de Cádiz y la de Algeciras
Actualizado: GuardarDecía el sabio Estrabón que en la antigüedad una ardilla era capaz de cruzar la Península Ibérica del Pirineo a Gibraltar de árbol en árbol. Incluso, lo podía hacer sin la necesidad de ambiciosas promesas de reforestación de la época, como las que hacen hoy Rajoy y Zapatero. Pero, lo que no sabía Estrabón es que en Cádiz en el siglo XXI, en pleno azote del cambio climático, es posible. Los deslindes que la consejería de Medio Ambiente ha efectuado sobre fincas que se situaban en diversas vías pecuarias de parajes naturales permite que el famoso corredor verde entre las dos Bahías (la de Algeciras y la de Cádiz) sea ya, por fin, una realidad.
El colectivo que ha luchado para que el camino se pueda completar sin obstáculos urbanísticos, Ecologistas en Acción, ha editado, junto a la Diputación provincial, una nueva guía para informar sobre los 93 kilómetros de recorrido: sus mejores rincones, flora y fauna, además de un completo anexo sobre datos útiles como dónde alojarse, qué comer o qué artesanía adquirir. Aunque el recorrido se puede completar, a pie, en bicicleta de montaña o a caballo en el tiempo que el senderista prefiera, proponemos una ruta de cuatro días con la que no se perderá ni un detalle de este magnífico paraíso que está a la vuelta de la escuela.
PRIMER DÍA
Puerto Real-Medina
Entre pinos, cerros, marismas y salinas
Discurre este primer tramo entre Puerto Real y Medina Sidonia. Su longitud es de 27 kilómetros que se pueden recorrer a pie en unas ocho horas. Presenta paisajes muy diversos que van desde las marismas y salinas que configuran el Parque Natural de la Bahía de Cádiz, a los pinos piñoneros y los cerros. Destaca también la Cañada Real del Camino de Medina, uno de los caminos que quedan para los rebaños de trashumancia, además de otras zonas de interés como El Zurraque o la vista que se divisa desde el Cerro del Berrueco.
El recorrido puede tener su lado cultural. El visitante podrá conocer los cascos históricos y monumentales de Puerto Real y Medina Sidonia. E incluso, podrá hacer una parada para recuperar fuerzas. Destaca el Ventorrillo el Carbón, una antigua casa de postas, donde finaliza el primer día de ruta.
SEGUNDO DÍA
Medina-Celemín
Piezas arqueológicas en plena naturaleza
Este segundo tramo discurre entre Medina Sidonia y el pantano del Celemín, a través de los términos de Medina y Benalup-Casas Viejas. Tiene un recorrido de 26,7 kilómetros. Se trata de tierras de campiña que puede realizarse en ocho horas. Es una zona de gran tradición ganadera, tanto vacuno (retinta y lidia) como caprino. La ruta se inicia en el Ventorrillo del Carbón por el que se llega a la Cañada Real de Algeciras.
La cañada pasa por debajo de la ermita visigoda de los Santos Mártires, considerada como la iglesia más antigua de Andalucía. Pero durante el trayecto hasta Celemín se puede sorprender con otras importantes obras monumentales como: el Castillo de Torre Estrella, dos puentes de origen romano como el de La Hoya, y la Torre de Benalup.
En cuanto al buen mantel, el viajero podrá parar en ventas de renombre como el ventorillo El Carbón, casa fundada en 1804, donde ofrecen un desayuno contundente, y otros platos como el conejo de campo o el arroz con venado. También son muy transitadas la venta Candela y el Mesón Rústico Machón donde conquistan los guisos caseros y las verduras de temporada.
El camino finaliza en el Embalse del Celemín, situado en el Límite del Parque Natural de los Alcornocales y en cuyo interior se forman islotes con una rica vegetación y ornitofauna.
TERCER DÍA
Celemín-Montera del Torero
La belleza del alcornoque y la compañía del buitre
Este tramo discurre por pleno corazón del Parque Natural de Los Alcornocales, a través de la Colada que empieza en la Motilla del Basinete y de la Cañada Real Medina-San Roque. Es significativo de este recorrido que se pasa de la cuenca atlántica a la mediterránea debido a los diferentes ríos que riegan estas tierras.
La Colada ha sido la última en abrirse al público debido a los largos litigios que ralentizaron que la vía pecuria fuera de dominio público. El bosque de alcornoque es la característica dominante en estas sierras, que albergan un buen número de especies, a la vez que permiten el aprovechamiento del corcho. Además, es muy fácil topar con algún rapaz como los buitres que, con seguridad, no le abandonarán durante el trayecto. En esta ruta se encontrará también con uno de los rincones más inolvidables del Corredor: el puerto de Zanona.
En cuanto a los rincones culturales no se tienen que dejar de visitar las ruinas del Monasterio Carmelita de El Cuervo, y, por supuesto, el Tajo de las Figuras, una de las mayores joyas de arte rupestre que existe en la provincia.
El recorrido finaliza en la Montera del Torero, formación rocosa de arenisca erosionada por la lluvia y el viento, cuya curiosa forma le ha dado nombre.
CUARTO DÍA
Montera del Torero-Los Barrios
Desde el bosque del corcho a la costa africana
Los últimos 17 km del corredor une el Parque Natural de Los Alcornocales con la Bahía de Algeciras. Descendiendo la sierra, se deja atrás las masas de alcornocales para bajar por bujeos arcillosos hasta las vegas fluviales del río Palmones. En el camino hacia Algeciras se topará con cuevas de pinturas rupestres de esta zona: las Bailadoras, la Carrahola o el Bacinete. El tramo es de 18 kilómetros por vía pecuaria, a lo que se añaden otros tres desde Los Barrios a la antigua estación. El entorno presenta valores paisajísticos significativos: Peñón de Gibraltar, la vista de la costa africana y el Paraje de las Marismas del Río Palmones, cerca de donde finaliza el recorrido.
Son cuatro días en los que se puede descubrir la verdadera riqueza que se esconde en un paraíso que está al lado de casa.
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