La Policía portuguesa admite que se precipitó al declarar sospechosos a los padres de Madeleine
El matrimonio MacCann pide ahora que se levante la inculpación por la desaparición de su hija el pasado mes de mayo en el Algarve
Actualizado: GuardarEl director de la Policía Judicial lusa, Alipio Ribeiro, admitió que pudo haber precipitación al declarar sospechosos a los padres de Madeleine McCann, la niña desaparecida en el sur de Portugal el pasado mes de mayo. «En este momento, a esta distancia, con la experiencia que tengo como magistrado de la Fiscalía, creo que tal vez debería haber habido otra valoración. Sobre eso no tengo dudas», señaló Ribeiro en declaraciones recogidas ayer por la prensa portuguesa.
El agente reconoció que hubo «una cierta precipitación», tras matizar que por la condición de su cargo no podía legalmente dar orden para declarar sospechoso al matrimonio McCann.
«Son inocentes»
El responsable policial aclaró también que la Fiscalía nunca le dio instrucciones sobre cómo llevar a cabo la investigación del caso o de cualquier otro proceso criminal en Portugal. Ribeiro rechazó así las acusaciones del presidente del colegio de abogados, Antonio Pinto, sobre la dependencia policial con respecto al poder político en Portugal.
El matrimonio McCann acogió favorablemente los comentarios de Ribeiro y pidió a a través de su portavoz, Clarence Mitchell, el levantamiento de su inculpación. «Como he dicho sin cesar, ellos son totalmente inocentes de toda implicación en la desaparición de Madeleine y a partir de ahora, a la luz de las observaciones de Ribeiro, exhortamos a las autoridades portuguesas a actuar de manera humana y a levantar el estatuto de argüido (sospechoso) lo más rápidamente posible», señaló Mitchell.
Por otra parte, la Fiscalía lusa anunció la pasada semana que volverá a enviar las cartas en las que pide a las autoridades británicas que interroguen a los amigos de los padres de Madeleine, después de que se pusiese en duda que ya se hubiese llevado a cabo.
Las autoridades de Lisboa respondieron de esa forma a una información del tabloide británico The Sun, que apuntaba que la Policía británica no había recibido la carta que los portugueses afirman que fue enviada el pasado siete de enero.