Somos Doscientos Mil | Donde las dan, las toman..., por Ildefonso Cáceres
Como les considero avezados lectores de prensa, aunque sólo acudan al quiosco los fines de semana -a ver si nos enmendamos-, les supongo al tanto de la noticia aparecida este sábado, según la cual los caballos de la Real Escuela Andaluza del Arte Ecuestre no bailarán en la Plaza Mayor de Madrid, dentro de los actos que tradicionalmente celebra Jerez como motivo de la Feria Internacional del Turismo.
Actualizado: GuardarComo opiniones las hay para todos los gustos, a estas alturas ya se ha dicho que la decisión responde a motivos políticos, pues con ella el Partido Popular pretende evitar que en vísperas de elecciones se produzca un desembarco masivo de socialistas en pleno centro de Madrid. También se ha dicho que todo se debe a un error burocrático. Otros creen que el acto coincide con el carnaval madrileño, famoso en el mundo entero. Incluso algunos opinan que tras cinco años haciendo las delicias de los madrileños en la Plaza Mayor, conviene un cambio de ubicación para «no cansar» al público. Ante ello nuestros gobernantes han optado por un nuevo emplazamiento, por lo que con mucha probabilidad será el paseo de coches del madrileño Parque del Retiro, el que este año vea danzar a nuestros universales equinos.
Sin embargo este columnista, incrédulo y suspicaz a fuerza de años, ha optado por analizar cada una de las anteriores excusas para ver que puede haber de cierto en ellas, no vaya a ser cosa que simplemente nuestros políticos nos estén tomando el pelo, como viene siendo habitual. Así que vayamos por partes:
Para que engañarnos, no hay motivos políticos. Es cierto que los caballos en la Plaza Mayor llevarían a muchos dirigentes socialistas hasta ella, como también estos irán al Palacio de IFEMA, donde se celebra FITUR, o a los múltiples actos en salas, discotecas y demás que la Feria del Turismo trae consigo. Personalmente no imagino al PP madrileño orquestando vetar el acto jerezano para evitar que Doña Pilar y sus huestes invadan Madrid, cuando en esas mismas fechas, el propio Presidente del Gobierno con su Majestad el Rey estarán inaugurando el evento principal. Tampoco creo que sean errores burocráticos. Si algo gusta a los funcionarios precisamente es la tranquilidad que proporciona su puesto de trabajo. Tras cinco años celebrándolo en idéntica ubicación, el funcionario conoce sobradamente el procedimiento como para no tener que equivocarse. Respecto a la coincidencia con las fiestas carnavalescas, la excusa es irrisoria. El carnaval en Madrid es sólo un poco más importante que el de Jerez, con la salvedad de que al ser Madrid tan grande, las celebraciones se concentran por Distritos. Que si una verbena en La Latina, que si un concurso en Usera, que si un baile en Vallecas... No existe en el programa carnavalesco de la capital nada que impida el uso de la plaza por los caballos. Curiosamente, la cabalgata si pasará por el interior del Parque del Retiro, el nuevo emplazamiento elegido para el evento ecuestre. Finalmente tampoco creo que sea cierto que el público madrileño se ha cansado. Madrid tiene suficientes habitantes como para que no se harten al menos hasta sobrepasar el listón de las trescientas ediciones, y sólo vamos por cinco.
¿Quieren conocer la verdad? Pues voy a recordarles lo que decían nuestras autoridades locales el pasado 13 de noviembre -hace poco más de dos meses-, con motivo de la visita del Alcalde de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón a nuestra ciudad. Gallardón participó en un acto de recogida de firmas en demanda del segundo hospital público para Jerez y ante su visita, el Partido Socialista jerezano emitió un comunicado donde calificaba de «deslealtad institucional» la participación del alcalde de Madrid en dicho acto, pues «interfería» en un tema «estrictamente jerezano».
Los socialistas consideraban «una paradoja» que Ruiz Gallardón viniera a Jerez a reclamar un segundo hospital, cuando la sanidad en Madrid «deja mucho que desear», tildando de «descabellado» el acto celebrado por el PP. El rosario de lindezas terminaba en tono irónico, preguntando los socialistas si la visita de Gallardón a Jerez no respondería a la necesidad de buscarle apresuradamente un puesto al Congreso de los Diputados en la candidatura del partido por Cádiz, «una vez que parece que no tiene sitio por Madrid».
¿Desembarco socialista ? ¿Error burocrático ? ¿Coincidencia carnavalesca ? ¿Hastío del respetable ? No hacen falta excusas cuando la respuesta es tan sencilla, simplemente: donde las dan, las toman