¿El asesino de Madeleine?

Clarence Mitchell, portavoz de los padres de Madeleine McCann, desaparecida hace 263 días en Playa de la Luz, en el sur de Portugal, cuando se encontraba de vacaciones con su familia, presentó ayer el retrato-robot de un hombre al que se quiere identificar como parte de las pesquisas para encontrarla. El individuo tiene entre 35 y 45 años, pelo largo liso, bigote, dientes prominentes y aire norteafricano. Mitchell pidió ayer la ayuda de personas que puedan aportar más información para identificar a este hombre, cuyo retrato incluye un teléfono español, donde un equipo formado por la agencia de detectives contratada por los McCann, Método3, con sede en Barcelona, recibe y filtra las llamadas. «Queremos saber quién es y dónde está. Y lo queremos saber tan pronto como sea posible. Hoy pedimos la ayuda de la gente», dijo Mitchell en una conferencia de prensa, en la mañana de ayer, en Londres. Y añadió: «Si no está conectado con el secuestro de Madeleine, debe al menos presentarse, de tal modo que la Policía y los investigadores privados puedan descartarle».

El portavoz de los McCann afirmó que la publicación privada de un retrato-robot no supone una crítica a la labor policial. Mitchell señaló que la elaboración de este tipo de bosquejos no es una práctica común en las investigaciones de la Policía portuguesa, a la que pidió que revise todas las declaraciones de testigos y sus pesquisas iniciales. En este momento, la investigación lusa sólo ha identificado como sospechosos oficiales del secuestro a tres ingleses, Robert Murat, residente en Playa de la Luz, y Gerry y Kate McCann, los padres de la niña.

En las semanas que siguieron a la desaparición de Madie ya se difundió un retrato-robot de un sospechoso, basado en el testimonio de Jane Tanner, amiga de los McCann, que vio a un hombre llevar a un niño en su hombro, cerca de la habitación en la que se encontraba Madeleine y sus hermanos, cuando acudía al restaurante en el que cenaban los McCann y sus amigos. Aquel bosquejo mostraba la fisonomía general de un hombre sin rostro. El presentado ayer es detallado y se basa en el testimonio de una turista inglesa, Gail Cooper, que se encontraba en Playa de la Luz en aquellos días. Cooper estaba con sus hijas y nietas de vacaciones antes de la llegada de los McCann y vio a un hombre que le pareció extraño caminar solo por la playa bajo la lluvia. Tres horas después, llamó a la puerta de su casa pidiendo dinero para tres huérfanos, que habían perdido a sus padres en un accidente de carretera y estaban acogidos en un orfanato próximo. Al cabo de tres días le vio de nuevo, cuando ya los McCann estaban en el Algarve, cerca del grupo de niños que llevaban a la playa los empleados de la guardería en el hotel en el que se hospedaba la familia de Madie.

Un periódico inglés, News of the World, investigó el testimonio de Cooper y descubrió que no existe el orfanato ni hubo tal accidente. La descripción de la turista inglesa permitió a una retratista que ha trabajado para el FBI elaborar el dibujo presentado ayer.