Registran los basureros en busca de pistas para localizar a la niña desaparecida en Huelva

Agentes de la Policía Nacional comenzaron ayer a registrar los basureros de Huelva capital en busca de una pista sobre el posible paradero de Mari Luz Cortés, la niña de cinco años desaparecida hace ya cinco días cuando salió de casa para ir a comprar golosinas a un quiosco cercano. La investigación ha descartado la implicación de las tres personas interrogadas hasta el momento, por lo que todas las hipótesis continúan abiertas.

El delegado del Gobierno en Andalucía, Juan José López Garzón, explicó ayer en Sevilla que se han comenzado a rastrear las cerca de 1.600 toneladas de basura -equivalente al contenido aproximado de ochenta 80 camiones- recogidas desde el pasado domingo, día en que se perdió el rastro a la pequeña. Los desechos permanecen inmovilizados en la planta de tratamiento de residuos urbanos de Villarrasa hasta que concluya la inspección a finales de la próxima semana.

Sin «grandes datos»

Sobre las líneas de investigación, López Garzón aseguró que todas siguen abiertas y que no hay pistas concretas. Asimismo, destacó que «no se han obtenido grandes datos» del registro ocular del domicilio de una de las tres personas interrogadas con relación

al caso. Fuentes policiales explicaron que se trata de un matrimonio y un familiar de los Cortés. Los investigadores sospecharon de ellos al ausentarse del barrio al día siguiente de la desaparición. Una vez localizados, los tres fueron interrogados fuera de la provincia.

En este sentido, la Subdelegación del Gobierno ha hecho un llamamiento para «no dar pábulo a rumores y falsas alarmas que puedan entorpecer la investigación». De forma paralela, continúan activas las labores de búsqueda del dispositivo de 150 agentes de la Policía Nacional y la Guardia Civil, a las que se han unido también bomberos voluntarios y un centenar de civiles.

Por otra parte, cerca de una treintena de personas, la mayoría de etnia gitana, se concentraron ayer en la Plaza de La Candelaria, en la capital tinerfeña, en solidaridad con la familia de la niña de cinco años Mari Luz, desaparecida el pasado día 13 en Huelva.

El portavoz de la Comunidad de Gitanos de Tenerife, Rafael Heredia, manifestó que el objetivo era solicitar que medie ante el Ejecutivo central para que no se archiven los casos de desapariciones.