Asesinados dos turistas belgas y dos ciudadanos yemeníes en el sureste del país
El Gobierno belga no tiene indicios que apunten a que los hombres que han abierto fuego contra los turistas pertenecieran a Al Qaeda
SANÁ Actualizado: GuardarDos turistas belgas, ambas mujeres, y dos ciudadanos yemeníes han sido asesinados por un grupo de hombres armados en la provincia de Hadramaut, en el sureste de Yemen, según fuentes de las fuerzas de seguridad yemeníes. Otro turista belga y un yemení han resultado heridos en el atentado. El Gobierno belga asegura que no hay indicios que apunten a Al Qaeda en la autoría del atentado.
Según el Ministerio de Interior yemení, las turistas son Klaudi Klawy y Catharine Glory, y el conductor del vehículo en que viajaban, y que también resultó muerto, era Ahmed al Amiri. Se desconoce la identidad del cuarto fallecido.
Según las primeras informaciones, un grupo de hombres armados ha abierto fuego desde un vehículo todoterreno en marcha contra un grupo de quince turistas procedentes de la región de Flandes, según ha informado la agencia Belga, que visitaban la zona de Hadarin, en esta provincia ubicada 900 kilómetros al sureste de la capital, Saná. El otro turista herido se encuentra grave y se estudia su repatriación lo antes posible.
Los presuntos terroristas huyeron del lugar hacia el desierto, tras lo que se puso en marcha un dispositivo de persecución en el que intervienen helicópteros para localizar y detener a los culpables. Según las fuentes, todas las carreteras y accesos a esta remota provincia, ubicada unos 900 kilómetros al sureste de la capital, Saná, han sido cortados por la policía.
"Querían matar"
Karina Lambert, superviviente del atentado, ha confirmado que los autores dispararon, sin previo aviso, con armas automáticas contra el convoy de vehículos en el que viajaban. "Querían matar, es seguro. Tras las primeras ráfagas de metralleta, se han aproximado a los coches y han disparado desde muy cerca", ha detallado Lambert.
Mientras tanto, el Gobierno belga no tiene indicios de que el atentado sea obra de Al Qaeda, según el ministro de Exteriores, Karel de Gucht. El titular de Exteriores ha reconocido, como hiciese Moratinos el pasado 2 de julio, que Yemen es un país de riesgo a donde se desaconseja ir, salvo que se trate de un asunto muy importante.
Este incidente es el primero de estas características desde que el 2 de julio del año pasado fueron asesinados ocho turistas españoles y dos súbditos yemeníes en Mareb, a 170 kilómetros al este de Saná, cuando un suicida se empotró con su coche todoterreno cargado de explosivos contra el convoy de vehículos de los turistas.