El dedo acusador

Las fuerzas de seguridad de Pakistán estudian las huellas dactilares de un dedo pulgar encontrado en el lugar de la explosión y que corresponde al autor del atentado contra Benazir Bhutto. La digitalización de huellas y fotografías de 91 millones de personas permite a las autoridades locales contar con un ingente banco de datos que a lo largo del año les ha ayudado a identificar a varios de los 54 suicidas que se han inmolado dentro de sus fronteras, los últimos cinco en diciembre.

«Estamos muy cerca, pero es una tarea complicada porque el dedo presenta graves quemaduras», señala un alto cargo del Ministerio de Interior. «Fuimos el primer país en apostar por el archivo de fotos junto al de huellas. Es muy útil en los atentados de los suicidas porque nos ayuda a identificar tanto a los terroristas, como a las víctimas», apunta la misma fuente.

El objetivo número uno de los servicios de seguridad, de todos modos, es Baitullah Mehsud, líder talibán al que el Gobierno acusa de haber ordenado el asesinato de la ex primer ministra. Según fuentes de Interior, Mehsud, que ha negado su implicación, también estaría detrás del atentado que costó la vida a más de cien personas en la fiesta de bienvenida a Bhutto en octubre.

Bilawal regresa a Oxford

Las investigaciones siguen abiertas, pero con el paso de los días se ha acallado la polémica surgida entre el Ministerio de Interior y el PPP sobre los motivos exactos de la muerte. Pese a los diferentes documentos aparecidos en los que se ve a una persona empuñando un arma a escasos metros del vehículo de la política, las fuentes oficiales mantienen la teoría del golpe en la cabeza. Este extremo es rechazado por familiares y simpatizantes de Benazir que insisten en que recibió varios disparos y culpan al Ejecutivo de no haber provisto de la suficiente seguridad a su líder, cuyo sustituto ha anunciado su regreso a su casa de Dubai.

Bilawal Bhutto Zardari, hijo de la asesinada y nuevo presidente del PPP, continuará después rumbo a Oxford junto a dos hermanas para proseguir con sus estudios de Historia. Su padre, Asif Zardari, se queda al frente de la formación que esta tarde celebra una nueva reunión del Comité Central para analizar el veredicto de la Junta Electoral sobre la celebración de elecciones.